El misterioso caso de la desaparición de la pequeña Madeleine, de cuatro años, vuelve a enredarse una vez más. La madre de la niña inglesa, desaparecida en mayo, Kate McCann, fue convocada ayer por la Policía portuguesa. La reunión se produjo precisamente el mismo día en que las autoridades lusas recibieron de la Policía inglesa los análisis de los restos de sangre encontrados en el apartamento donde desapareció Maddie.

Kate McCann entró en las dependencias de la Policía Judicial lusa de Portimao (sur del país) pasado el mediodía de ayer. No se explicó si acudía para ser interrogada, informada o a prestar declaración.

Fuentes oficiales también revelaron que la Policía espera en breve reunirse por separado (se trata de la primera vez en la investigación) con el padre de Madeleine, Jerry.

Especulaciones

A pesar de que las autoridades no han informado oficialmente sobre los resultados de los análisis, medios de comunicación ingleses y portuguses aventuraban ayer que hay indicios de que esa sangre pertenece a la niña.

Madeleine desapareció en el sur de Portugal cuando dormía junto a sus hermanos mientras sus padres cenaban en un restaurante cercano.