El Servicio de Ginecología y Obstetricia del Hospital Joan XXIII de Tarragona ha usado una nueva técnica que permite girar en menos de un minuto en el momento del parto a los fetos que vienen de nalgas hasta las 37 semanas de gestación.

La técnica 'versión cefálica externa' se utiliza cuando el feto va de nalgas y los padres quieren un parto vaginal, con lo que para evitar la cesárea dan su consentimiento para utilizarla, ha informado este martes el centro en un comunicado.

Los factores que limitan esta práctica son la semana de gestación —por encima de las 37—, que la mujer tenga poco líquido amniótico y que el feto no tenga la cabeza flexionada.

Las maniobras son realizadas por dos obstetras, de manera que mientras uno intenta desfalcar la nalga, el otro aguanta la cabeza del bebé; de forma secuencial, los dos intentan girar el feto poco a poco.

Para poder hacer la maniobra, inicialmente, la madre debe poner las piernas por encima de la cabeza para ayudar a desencajar el feto, además de que se le administra un fármaco para detener las contracciones, y un tercer profesional vigila con un ecógrafo que el feto no sufra.

Riesgos del parto de nalgas

El ginecólogo y obstetra del Joan XXIII, Albert Guarque, asegura que "si el feto gira, la maniobra no llega al minuto y la madre tolera bien un dolor leve o moderado debido a la corta duración".

Según un artículo de la revista 'The Lancet' publicado en el 2000, no se recomienda el parto de nalgas por el sufrimiento del feto y las posibles complicaciones, como fracturas u otras secuelas, según este estudio realizado por Mary E.Hannah.

Guarque ha dicho que la falta de práctica en los hospitales ha influido también en la formación de los residentes y, por tanto, en la aplicación del parto de nalgas que, precisamente hasta el año 2000, era habitual, pero en los últimos años ha descendido.

Técnica "muy segura"

La alternativa al parto de nalgas ha sido la cesárea que, para la madre, "tiene riesgos propios de una cirugía, como el sangrado o posibles infecciones", ha explicado el ginecólogo, quien ha destacado que esta nueva técnica que es muy segura.

El Joan XXIII realiza esta técnica desde 2016 con Guarque y la doctora Mònica López, y el objetivo es formar a otros compañeros del servicio y residentes para consolidarla y que "futuras madres pierdan el miedo y conozcan que existe esta posibilidad".