La consejera de Desarrollo Rural y Recursos Naturales del Gobierno asturiano, la socialista María Jesús Álvarez, ha dicho este martes que la empresa pública Serpa no puede contratar actualmente a los 18 veterinarios despedidos por la empresa pública estatal Tragsatec. Existen motivos jurídicos, económicos y Serpa no tiene ahora mismo puestos de esas características, ha apuntado. "No es posible", ha dicho.

Álvarez ha comparecido en una comisión parlamentaria, a petición del PP, para informar sobre la resolución de la Junta General que pedía la incorporación de los 18 veterinarios, que desarrollaban la campaña de saneamiento, en Serpa.

Sin embargo, la dirigente asturiana ha dicho que hacer escritos en el parlamento es "fácil" pero que la iniciativa es casi de "imposible cumplimiento" debido a los condicionantes jurídicos y legales. Así, ha explicado que Serpa tiene que contratar respetando los principios de contratación pública.

Álvarez ha dicho que siempre rechazó el expediente de regulación de Empleo de Tragsa y Tragsatec, que relacionó con la reforma laboral impulsada del PP. Sin embargo, ha manifestado que si Tragsatec sigue haciendo el trabajo encargado por el Principado es porque no se podía romper el contrato sin afectar de forma negativa a la campaña de saneamiento.

En estos momentos, en Asturias hay 77 veterinarios de campo trabajando en esa campaña, encomendada a Tragsatec. De ellos 27 son nuevas contrataciones que ha incorporado la compañía estatal. Esas nuevas contrataciones , ha reconocido la consejera, incluyen a personas jóvenes y con poca experiencia. De hecho, ha relacionado este aspecto con algún retraso que se ha producido.

La idea de Álvarez sigue siendo la de contratar la campaña de saneamiento de 2017 a Serpa y no a Tragsatec. Sin embargo, no ha garantizado que se incluyan a los 18 trabajadores despedidos en la compañía pública asturiana. Ha reconocido que están trabajando en esa línea pero que se están trabajando con más dificultades de las previstas. "Hay que buscar soluciones que sean totalmente legales, para evitar demandas de otros colectivos que nos pudieran conducir a un callejón sin salida", ha advertido.

Los trabajadores despedidos forman parte del colectivo que fue integrado en Tragsatec fruto de un acuerdo entre los gobiernos regional y estatal de 2005, cuando en ambas administraciones gobernaba el PSOE. Se decidió así tras un conflicto laboral de los veterinarios. La solución que se articuló es que los veterinarios se integraban en Tragsatec, y esta compañía se encargaba de las campañas de saneamiento. El despido de los 18 profesionales ahora ha roto, para diferentes grupos políticos, aquel acuerdo.

Foro ha puesto sobre la mesa otra posibilidad si tantos problemas hay encima de la mesa para contratarles en Serpa. Se trataría de que el Gobierno sacase a licitación el servicio de las campañas y contratase a una empresa pública que hubiese integrado a esos trabajadores. María Jesús Álvarez no ha desechado esa posibilidad, aunque ha señalado que ella siempre prefiere que sean medios públicos los que se encarguen de algo así.

Desde IU han criticado la "dejadez" y la "falta de voluntad política" de la Consejería a la hora de reincorporar a los veterinarios despedidos. El diputado del PP, Luis Venta, ha acusado a la consejera de "mirar para otro lado", pese a que, ha asegurado, sabía las consecuencias que iba a tener el expediente de regulación de empleo.