El vicesecretario de Comunicación del PP, Pablo Casado, ha asegurado que sigue adelante la investigación interna del partido en la Comunitat Valenciana y que apoya las decisiones de su presidenta allí, Isabel Bonig, porque el objetivo común es "lanzar el mensaje de que si se ha hecho algo mal se va a pagar".

En rueda de prensa tras el comité de dirección de su partido, el portavoz ha asegurado que la dirección nacional mantiene su respaldo a la presidenta de los 'populares' valencianos, Isabel Bonig, que mantiene en suspensión cautelar de militancia a los afectados por el 'caso Taula', que investiga un supuesto blanqueo de capitales por el PP en el Ayuntamiento de Valencia.

En los últimos días, la cúpula del PP valenciano que dirige Isabel Bonig ha manifestado su intención de expulsar a los nueve ediles investigados en este presunto caso de blanqueo de capitales si 'Génova' no lo hace. Esa urgencia del PPCV contrasta con los tiempos de la dirección nacional del PP, que ha pedido esperar a que acabe el expediente y no precipitarse en las decisiones.

Casado ha asegurado que el expediente informativo abierto sobre los cargos valencianos puede "dictaminar la expulsión definitiva como afiliados" y que no hay contradicción con los ritmos que quiere seguir la dirección valenciana.

Ese expediente incluye también a Rita Barberá, senadora y ex alcaldesa de Valencia. El Comité de Derechos y Garantías del PP sigue sin fecha para interrogarla, a la espera de que el juez se pronuncie y decida si eleva o no exposición razonada al Tribunal Supremo para ser investigada judicialmente, según han informado a Europa Press fuentes 'populares'. Por lo pronto, el órgano disciplinario empezó la semana pasada con las declaraciones de los concejales implicados en este presunto caso de blanqueo de capitales.