La Coordinadora de Escuelas Infantiles de Andalucía han dado cuenta de una ralentización de las inscripciones en los centros de la comunidad en los primeros días del plazo otorgado por la administración para el proceso de escolarización del primer ciclo de Educación Infantil de cara al próximo curso.

No obstante, la presidenta de la coordinadora, Rosario de la Peña, ha explicado a Europa Press que, por ahora, todo se mantiene dentro de una relativa normalidad, pues solo ha transcurrido poco más de una semana desde el comienzo del plazo. Por ello, a día de hoy es "difícil" establecer si ésta será la tendencia.

De la Peña ha subrayado que los coletazos de la crisis pueden estar relacionados con este descenso, pues "esto es un coste para las familias y tienen que valorarlo: muchos vienen y preguntan, y el motivo puede encontrarse en esa necesidad de recortar presupuestos" que hace que, salvo problemas de conciliación, no se inscriba al menor.

Para las plazas conveniadas con la Junta de Andalucía, la cifra, según lo anunciado por el Ejecutivo autonómico, tendrá el máximo de 278,88 euros —con una reducción de diez euros al no poder proseguir con el pago de la cantidad compensatoria de 1.000 euros por unidad acordado en 2013 al no abonarse el mes de agosto, inhábil para las escuelas infantiles—, pudiendo luego optar a diferentes bonificaciones.

El colectivo, al respecto, ha remitido un escrito a la Consejería de Educación de la Junta andaluza en el que reclama que se especifique la argumentación jurídica a la que se atiene la administración autonómica para no proceder al pago compensatorio. Frente al razonamiento, expuesto en la Mesa de Infantil, de que dicho abono no se ajusta a derecho al no poder pagarse por un servicio que no se presta, "hemos visto partidas presupuestarias para otros asuntos educativos de cero a tres años, como ayudas en municipios o servicios complementarios, pero no para un acuerdo ratificado en una mesa", ha dicho De la Peña.

Ésta, que lamenta que "cada uno pinte diferente la situación", ha expuesto que "la propuesta no es rentable", pues la Junta opta por subir diez euros el precio de la plaza conveniada. Aunque ésta era una reivindicación histórica del sector al permanecer 'congelado' el coste durante mucho tiempo, los profesionales se oponen a que el monto de la medida acabe repercutiendo en las familias, "que están optando a precios por debajo de los nuestros, en los que por otra parte no sabemos qué servicios dan, pero sí que no se puede abaratar más de lo que damos".

Otro motivo de rechazo se debe a que, mientras la compensatoria —cuya tardanza en el cobro ha sido reiteradamente denunciada por las guarderías, ya que obligaba a un inicio en precario del servicio con cada curso escolar— era por unidad, el nuevo pago se hará por plaza cubierta.