La Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) deberá aumentar la dotación de agua que tiene reconocido un ganadero de ovino y caprino porque, al hacer los cálculos para denegar la ampliación que este había solicitado, no tuvo en cuenta que las crías lactantes, además de leche, también beben agua.

Así se dispone en una sentencia dictada por la Sala de lo Contencioso del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de la Región de Murcia, que estima el recurso del ganadero y condena al órgano de cuenca a aumentar la dotación que tenía concedida de 2.308 metros cúbicos al año a 7.000 metros cúbicos.

La sentencia, a la que ha tenido acceso Efe, estima así el recurso presentado por el demandante frente a la resolución de la CHS que había accedido a incrementar la dotación inicial -procedente de aguas subterráneas- sólo hasta 3.500 metros cúbicos.

La decisión del TSJ, contra la que no cabe recurso ordinario alguno, condena además a la CHS a pagar las costas generadas por el recurso.

Afirman los magistrados de lo Contencioso que la administración, al considerar suficiente el volumen de 3.500 metros cúbicos, no tuvo en cuenta, al valorar las cabezas de ganado que había en la explotación, la existencia de las crías que se generan a lo largo del ejercicio.

Además, consideró que durante el periodo de lactancia -que se prolonga entre tres meses y tres meses y medio- no consumen agua alguna, "apreciación que no es del todo correcta".

Y añade que "las crías, incluso en ese periodo -en el que consumen también pienso granulado-, necesitan beber agua, aunque no lo hagan en la misma cantidad que cuando son adultas".