Peleas, droga, botellón, ruido. Ése es el ambiente al que se enfrentan cada fin de semana los vecinos del Orzán. Ahora viven atemorizados por el incremento de pandilleros juveniles en la zona, que según los afectados han aprovechado las bajas policiales de agosto para llenar de inseguridad este céntrico barrio coruñés.

Los residentes aseguran que, como mínimo, los fines de semana se producen unas cinco peleas frente a sus domicilios. «Suelen ser siempre los mismos los que montan el escándalo y nada bueno buscan si ya salen de casa con una navaja en el bolsillo», asegura Aure López, presidenta de la asociación de vecinos del Orzán.

Reyertas...

... multitudinarias: Según cuentan los propios afectados, las peleas que salen a la luz son sólo la mitad de las que realmente se producen. «Suelen ser grupos muy numerosos, de 15 ó 20 personas, que acorralan a otra para agredirle, y siempre a altas horas de la madrugada», explican.

La única solución, según los vecinos, es incrementar la presencia policial, algo que por el momento afirman que no se ha hecho. «Todas las administraciones nos ofrecen promesas,

pero queremos hechos», denuncian. Para ellos la inseguridad no sólo no se ha solucionado, sino que empeora con el paso de los meses. «No sé hasta dónde tiene que llegar este problema ni qué tiene que pasar para que hagan algo. Es un desmadre», añaden los vecinos del Orzán.

Nueve detenidos por agredir a una familia

La Policía Nacional informó ayer de la detención de nueve jóvenes por el apuñalamiento de un hombre que intentaba sacar a su hijo de una pelea.

Los hechos ocurrieron el pasado 12 de agosto en el pasadizo del Orzán, donde los nueve detenidos (de un total de 13 implicados, todos ellos mayores de edad) estaban pegando a un menor. Sus amigos llamaron a la familia de este joven y, según el 091, cuando la madre bajó del coche fue agredida y el padre, al socorrer a su hijo y a su mujer, recibió una puñalada en la espalda. El supuesto autor tiene 19 años y fue detenido.

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