La Unión de Consumidores de Andalucía (UCA-UCE) ha subrayado "la ineficacia o injusticia" de tasas sobre alimentos tras la propuesta del ministro de Finanzas británico, en la presentación de su nueva política fiscal, de aplicar un nuevo impuesto a las bebidas azucaradas para recaudar recursos adicionales para financiar actividades deportivas en los colegios.

En un comunicado, UCA-UCE ha apuntado que esta medida "ha reabierto la polémica sobre la conveniencia de utilizar este tipo de fórmulas para combatir determinadas problemáticas de salud, y especialmente la obesidad infantil, en sociedades desarrolladas".

La Unión de Consumidores se viene posicionado históricamente en contra de estas "tentativas de subidas impositivas de carácter indirecto, que pagarían todos los ciudadanos por igual con independencia de sus niveles de renta".

Según ha explicado, "satanizando el consumo excesivo de azúcar por sus nocivos efectos sobre la salud de la población, también se podría barajar o generalizar una tasa sobre todos los productos que contengan este ingrediente".

La demanda actual de los consumidores y sus organizaciones representativas como UCA-UCE, lejos de solicitar nuevos gravámenes o impuestos, es que "el sector de la industria alimentaria en su conjunto acometa una decidida apuesta por la innovación para reducir el excesivo aporte calórico de muchos alimentos, teniendo siempre presente la correcta cobertura de la creciente demanda de información nutricional de los consumidores, a través de un correcto y claro etiquetado".

Por su parte, según ha apuntado UCA-UCE, a las administraciones públicas "les correspondería combatir estos problemas con eficaces programas preventivos de salud pública para mejorar los hábitos nutricionales y combatir el sedentarismo".

Según la organización de consumidores, en Reino Unido, la nueva tasa presentada se aplicará a aquellas bebidas con azúcar añadido por encima del límite de cinco gramos por 100 mililitros, un país que "puede que sea en la actualidad el europeo con mayor tasa de obesidad, con aproximadamente un 25 por ciento de su población adulta afectada". "España ocuparía el segundo lugar en este triste ranking europeo, con el 24 por ciento de su población afectada, especialmente la infantil", ha agregado.

Por su parte, UCA-UCE ha recordado que la Asociación de Bebidas Refrescantes (Anfabra), se ha mostrado "inmediatamente en desacuerdo con la introducción de este impuesto a las bebidas azucaradas, porque considera que se trata de una medida discriminatoria y arbitraria".

Según esta asociación, "en España entre los años 2009 y 2014 el azúcar por 100 mililitros del conjunto de bebidas refrescantes puestas en el mercado ha alcanzado el 19 por ciento". Igualmente, esta patronal ha señalado que la cuarta parte de los refrescos que pone en mercado "son ya sin azúcar y sin calorías, lo que las hace compatibles con una alimentación equilibrada".