ERC-MES considera que CiU no ha tenido voluntad de pacto real con los republicanos en el Ayuntamiento de Girona, y han achacado el fallo de las negociaciones a la negativa de ERC a formar parte del gobierno municipal.

En declaraciones a los medios, ERC-MES ha dicho sentirse "perpleja" porque el pacto que tenían casi cerrado con Convergència era muy similar al que al final han pactado con el PSC.

Para Esquerra, entrar a formar parte del gobierno "no era una posibilidad que valoraran" ya que era, según comentan los republicanos, igual que entregar un cheque en blanco, según ha explicado el concejal de ERC, Martí Terés.

Terés ha desgranado parte de la negociación que habían hecho con CiU y en la que contemplaban la rebaja de ocho a cinco los asesores y un sueldo de 68.500 euros para el alcalde.

Terés ha criticado a CiU por pactar con un partido que se ha alejado del derecho a decidir y también se ha mostrado "contrariado" con la rueda de prensa que ofreció el alcalde dimitido Albert Ballesta, que califican de "desafortunada"