La secretaria de la Mujer de CCOO de Asturias, Mapy Artidiello, ha pedido este jueves medidas que contribuyan a "cambiar las actitudes de género sexistas" para así poner fin a las desigualdades entre hombres y mujeres en el mercado laboral.

Artidiello ha realizado estas declaraciones durante la presentación del informe de CCOO 'Las mujeres en el mercado laboral asturiano', donde ha abogado por una mayor implicación de los hombres en la esfera doméstica, cambios en la organización del trabajo y un mayor desarrollo de las redes públicas de infraestructuras y servicios de cuidados, como elementos "esenciales" para combatir esta situación.

Acompañada por el secretario general de CCOO de Asturias, Antonio Pino, Artidiello ha pedido además la integración en la red pública educativa de las escuelas de 0 a 3 años, el desarrollo "efectivo" de la ley de dependencia y la "inmediata ampliación" del permiso de paternidad a cuatro semanas. Esta última medida, ha asegurado, "propiciaría un cambio en las actitudes de género de muchos hombres hacia un modelo menos sexista y contribuiría a reducir la discriminación de las mujeres en el mercado laboral".

Las mujeres son "las más castigadas" por la crisis

El informe elaborado por CCOO refleja que las mujeres son "las más castigadas" por la crisis económica iniciada en 2008. En 2015, la cifra de mujeres trabajadoras se situó en 182.800, lo que implica 5.100 puestos de trabajo más que en 2014. Sin embargo, desde el sindicato critican que más de la mitad fueron trabajos a tiempo parcial (2.900) y que la contratación indefinida a tiempo completo "sigue siendo minoritaria" entre las mujeres.

En concreto, en 2015 40.600 mujeres, el 22,2 por ciento de las ocupadas, trabajaban a tiempo parcial, mientras que el porcentaje entre hombres es del 6 por ciento. Asimismo, 40.200 mujeres, el 26,3 por ciento de las asalariadas, están sujetas a un contrato temporal, frente al 24,3 por ciento registrado entre los hombres.

Según Pino estas cifras evidencian que "la ocupación mejora a costa de engrosar el colectivo de trabajadores pobres, porque las mujeres se incorporan al mercado laboral, pero duran menos y tienen peores contratos".

El paro se hace crónico

El informe pone de manifiesto además que en 2015 hubo una media de 41.700 mujeres buscando empleo activamente, un 17,7 por ciento menos que en 2014. No obstante, desde el sindicato no ven totalmente positiva esta cifra puesto que en la región hay 17.900 paradas más que en 2008 "debido a la intensa destrucción de empleo sufrida hasta 2013".

Actualmente, el 18,59 por ciento de las mujeres no logran encontrar trabajo y la prolongación de la crisis "ha provocado una preocupante cronificación del desempleo" entre mujeres, de tal manera que en 2015 en torno a 23.700 mujeres llevaban más de un año buscando empleo activamente. Entre ellas se encuentran 16.500 paradas de "muy larga duración", que llevan más de dos años buscando empleo. "Si a ellas se añaden las que desisten y a las que se dedican en exclusiva al trabajo doméstico, podríamos tener una tasa de desempleo entre mujeres del 25 por ciento", ha advertido Artidiello.