El portavoz del PP en las Juntas Generales de Gipuzkoa, Juan Carlos Cano, se ha mostrado convencido de que la Diputación Foral de Gipuzkoa "debe mostrar firmeza frente a la estrategia de la Sade de que 'cuanto peor mejor' y, si se cae, mejor todavía" en torno al edificio del Bellas Artes en San Sebastián.

En un comunicado, Cano ha destacado que "el cambio sustancial" en torno a este edificio se produjo hace un año cuando fue catalogado Bien Cultural Inventariado por parte del Gobierno vasco, lo que hizo que "cobrara importancia la Ley de Patrimonio Cultural Vasco, en concreto sus artículos 35.2 y el 20, que otorgan a la Diputación Foral un papel tutelador dentro de este proceso".

En su opinión, dentro de las funciones de la Diputación está la búsqueda de colaboración público privada e interinstitucional pero, por otro lado, "también hacer frente a las tácticas marrulleras a las que en estos momentos se está recurriendo en paralelo con la legalidad vigente".

Cano ha considerado que "sería un error que, en esta situación y en su papel de tutelador, la Diputación mirase para otro lado", al tiempo que ha insistido en la necesidad de diálogo. "Hay que hablar, tenemos que obligar a las partes implicadas a sentarse, al margen de que se pueda pedir flexibilidad al Gobierno vasco", ha insistido.

En cuanto al proyecto de restauración de la cúpula por parte del Ayuntamiento, el juntero popular ha recordado que "es la Diputación Foral quien tiene orden ejecutiva y a quien corresponden las acciones subsidiarias de reposición e incluso de paralización, si es que el proyecto no respetara la catalogación de Bien Cultural, aunque trabaje con el Consistorio".

"Además, no se puede anunciar públicamente que el Ayuntamiento está haciendo el proyecto, si luego nos dice que no tenemos recursos. No deben crear expectativas que no se pueden cumplir. Hay que poner pie en pared y dejarnos de vaivenes en este tema", ha afirmado.

Finalmente, ha considerado que, si no hay un punto de encuentro con el propietario, "quizás las instituciones deban repartirse los costos y reponer la situación patrimonial para demostrarle que su estrategia de 'cuanto peor, mejor', no va a ocurrir". "Porque si entiende que las instituciones van a permitir sus desmanes, entonces ni mesa de diálogo ni nada", ha concluido.