La muerte de un ciudadano nigeriano el domingo pasado en Tesalónica causó el enardeciminento de una multitud en la zona de Kalamaria de esta ciudad del norte de Grecia.

El inmigrante, de 25 años, que se dedicaba a vender discos piratas, murió cuando cayó desde la ventana de una cafetería, de acuerdo con la policía, pero algunos testigos aseguraron que la caída se produjo cuando éste era perseguido por la policía local.

El episodio enfureció a la comunidad inmigrante, lo que causó que se vivieran varias horas de violencia callejera.

La policía dijo que el hombre de 25 años estaba vendiendo discos compactos pirateados en Tesalónica, la segunda ciudad más importante de Grecia, alrededor de las 12 de la noche.

Aseguran que el inmigrante nigeriano se atemorizó cuando vio que dos hombres lo estaban observando y pensó que eran policías encubiertos dispuestos a practicarle una requisa.

El nigeriano corrió entonces hacia la ventana de la cafetería, y saltó.

Al caer, se estrelló contra el pavimento de manera tan violenta que murió de manera instantánea, de acuerdo con la policía.

Sin embargo, miembros de la comunidad inmigrante rechazaron esta versión y se reunieron frente a la cafetería donde se produjo el hech0 para arrojarle piedras a los policías.

También rompieron sillas e intentaron prenderles fuego.

Durante los disturbios resultaron heridos, de manera leve, tres policías.