El exportavoz parlamentario Carlos Aymerich ha avanzado que dejará la militancia del BNG, tras las decisiones que ha adoptado el plenario de la XV Asamblea Nacional al respecto del futuro de la organización frentista. "Más lealtad no se nos puede pedir", ha enfatizado.

"Yo diría que fue un resultado digno, que es lo que se dice en estos casos", ha bromeado, en declaraciones a los medios, tras las votaciones de los textos alternativos al oficial, todos ellos rechazados por la mayoría.

Carlos Aymerich se ha preguntado si "pintan algo aquí" los que este domingo han mostrado sus discrepancias con la línea oficial, ya que, ha dicho, "les están señalando la puerta". Así, ha agregado que el BNG no tiene sentido seguir trabajando "en donde uno no es bien recibido" y ha subrayado que "lo más honesto es reconocer que hay una mayoría que legítimamente puede adoptar la decisión que entienda más coherente, pero llega un momento que no queda otra".

"Los que estamos participando aquí es un tercio de los que participamos en Amio, eso da una imagen de lo que es hoy el BNG y lo que vemos es que la línea oficial, dice que hay que ir por esa línea", había manifestado, previamente, Aymerich, quien "como gallego" le ha "deseado suerte al BNG".

"Pero los que no compartamos esa línea y los que no seamos ni la UPG ni del Movemento Galego ao Socialismo (que lidera Rafael Vilar), estamos obligados a hacer nacionalismo desde otros lugares. No hay mucho más que decir", ha enfatizado.

La gente que "perdió amio"

Carlos Aymerich ha subrayado que la gente que a presentado la enmienda a los textos oficiales que él ha defendido son aquellos que "perdieron la asamblea de Amio y que se quedaron en el BNG". El exdiputado lideraba en 2012 Máis Galiza que, para la asamblea de Amio, se alió con el Encontro Irmandiño de Xosé Manuel Beiras para disputarle la hegemonía interna a la UPG en el seno del BNG.

Entonces llegó a haber un empate técnico pero, poco después, los 'irmandiños' de Beiras abandonaron el BNG y las bases de Máis Galiza también se escisieron del Bloque, si bien, Carlos Aymerich y varios alcaldes en torno a él permanecieron en la formación nacionalista.

Así las cosas, Aymerich ha recordado que este grupo "quedó en el BNG" y recibieron de la organización frases de que "no se marcharan" y que "iban a coser" la organización y hacer de ella "la casa común del nacionalismo".

Luego, en la asamblea de 2013, en la que salió elegido Xavier Vence como portavoz nacional, "incidieron en la misma línea" y, "la gente que de buena fe se acercó desde entonces (a ellos), también Xavier Vence, sale ahora centrifugados". "Por lo tanto, más lealtad no se nos puede pedir", ha apostillado Aymerich, quien ha dicho que "aguantaron más de lo que se podía esperar" y que "para mártires tampoco nacieron".

"sigo siendo nacionalista"

"Me aparto pero sigo siendo nacionalista", ha remarcado Aymerich, quien ha advertido de que el BNG es "hoy una coalición entre la UPG y Movemento Galego ao Socialismo, legítimo, pero no es el BNG de los años 90".

"Por ahora aún no mandé la carta ni llamé al banco, pero que no tengo más camino en el BNG es evidente", ha aseverado, a preguntas de los periodistas. Sobre si habrá una cascada de bajas, ha comparado la situación con la de un limonero: "unos maduramos hace tiempo y caímos al suelo, otros van madurando, pero cuando un limón maduro, cae". Además, Aymerich no ha descartado que más miembros de Abrente sigan este camino y ha advertido "hay divisiones en la UPG".

Por otro lado, ha llamado la atención sobre que las votaciones de las enmiendas a la totalidad fueron "sucesivas" y, sin embargo, en el número de sufragios totales hay "una diferencia de 200 personas" que en el texto defendido por él, que representa al colectivo Abrente, por algún motivo no han votado.

Los demás se quedan

Por su parte, las diputadas que defendieron un voto particular conjunto, Tereixa Paz y Carme Adán, y la profesora universitaria que también impulsó un texto alternativo, Alba Nogueira, ratificaron que, pese a su postura crítica con el camino que ha tomado la formación seguirán en la organización frentista trabajando dentro.

En declaraciones a los medios, Carme Adán ha subrayado que seguirán "aquí y en el BNG", y buscarán, desde dentro, que la organización "se abra y piense en la política de alianzas".

Por su parte, preguntada por si continuará estando cómoda en la UPG, cuyo núcleo ha sido el principal impulsor de las líneas políticas oficiales, Tereixa Paz ha manifestado que "lo único que tiene decidido" es que seguirá "en el BNG". "Tal y como dije, con independencia de lo que fuese el resultado. Hay que construir desde perspectivas diferentes", ha remarcado.

En este sentido, Alba Nogueira, preguntado por ello, ha manifestado que la postura de Aymerich de dejar el BNG es la de él y ha expresado su intención de esperar "a que se den los primeros pasos de la refundación a largo plazo". Además, ha indicado que buscará, internamente, llegar al "mayor número posible de militantes para repensar la organización de otra manera".