La Fiscal del Tribunal Supremo Pilar Martín Nájera, titular de la Sala de Violencia sobre la Mujer, ha destacado este miércoles en Oviedo la necesidad de "luchar" por que las víctimas de violencia de género denuncien a sus agresores.

Momentos antes de clausurar las jornadas 'Erradicar la violencia de género: un objetivo de país, una respuesta desde Asturias', la Fiscal ha resaltado la existencia de "muchas las sentencias condenatorias" que evidencian que "aunque a veces tarde, el agresor paga por lo que ha hecho".

Frente a la actuación judicial, Martín ha explicado que el principal problema al que se enfrentan los magistrados cuando se presenta una denuncia es el derecho a la víctima a no declarar. "Al ser delitos que por lo general se producen en el ámbito privado, el único testimonio es el de la víctima, por lo que si se acoge al derecho a no declarar nos quedamos sin prueba", ha subrayado.

Sobre el perfil de los agresores, la Fiscal ha recordado que no suelen aumentar de forma escalonada la violencia sobre la mujer, sino que en ocasiones agrede y luego "es muy buen marido", se arrepiente, y "vuelve otra vez", desconociendo el desencadenante de la última agresión.

Por otro lado, la Fiscal ha avanzado que están trabajando en una modificación del régimen de visitas de los agresores a menores. Al considerar a los hijos como víctimas aun cuando solo son testigos de la violencia sobre su madre, la protección del menor puede llevar a la suspensión del derecho de visitas o a la privación de la patria potestad sobre el menor.

Igualmente, ha afirmado que se está poniendo a prueba un nuevo sistema de valoración del riesgo en los informes policiales "mucho más exigente" con la evaluación.