Este sábado 27 de febrero se cumplen 40 años de la proclamación de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD) por el Consejo Nacional Provisional Saharaui y desde Izquierda Unida Castilla-La Mancha han anunciado que llevarán a diputaciones y ayuntamientos donde tiene representación una moción para reclamar una solución que asegure su libertad, autodeterminación "y que se garanticen los derechos humanos en los territorios ocupados".

Concretamente, ha indicado en nota de prensa, la federación solicita a través de su moción el apoyo a las reivindicaciones y derechos del pueblo saharaui, denuncia que la violación de derechos humanos en el Sáhara Occidental, e insta a que la bandera del Sáhara ondee, este próximo día 27 en ayuntamientos y diputaciones.

Del mismo modo, pide que se apruebe una ayuda económica para paliar las consecuencias de las inundaciones en los campamentos de Tinduf y remitir este acuerdo a la Delegación Saharaui de Castilla-La Mancha.

"A pesar del tiempo transcurrido, la situación política no ha hecho otra cosa que empeorar para el pueblo saharaui", ha indicado la federación de izquierdas, que recuerda que en la Audiencia Nacional se mantiene abierto un procedimiento penal por genocidio contra el Pueblo Saharaui y que, en estos momentos, "se impide de manera sistemática el acceso al territorio saharaui de observadores independientes, parlamentarios y periodistas".

Izquierda Unida señala que Marruecos mantiene, desde 2012, "paralizadas" las negociaciones encaminadas a encontrar una solución al conflicto, "con la complicidad y la dejadez de los gobiernos de Francia, Estados Unidos y España".

Asimismo, indica que los campamentos de refugiados también cumplen 40 años y que la ONU continúa prorrogando Misión de las Naciones Unidas para el Referéndum del Sáhara Occidental (MINURSO) año tras año "sin cumplir su objetivo: el referéndum de autodeterminación del Sáhara Occidental y la salvaguardia de los derechos de los refugiados en la zona bajo su competencia".

A todo ello ha añadido que en octubre del pasado año sufrieron unas lluvias torrenciales que provocaron que 25.000 personas perdieran sus hogares.