Las autoridades jordanas han decretado el cierre de 600 puestos y restaurantes de kebabs tras la muerte de un ciudadano el domingo y la intoxicación de otros 200 en la localidad de Boqa, al noreste de Amán.

La agencia oficial de noticias jordana, Petra, ha informado este lunes de que las autoridades sanitarias han adoptado esta medida para proteger la salud de los ciudadanos y que los negocios permanecerán cerrados hasta próximo aviso.

Además, un comité se encargará de adoptar las medidas necesarias para evitar nuevos casos de intoxicación por la bacteria de la salmonella detectados en los bocadillos de pollo y en la mayonesa.

El sábado, 206 personas que comieron shawarma (un tipo de kebab) de pollo en el mismo restaurante fueron atendidas por intoxicación en varios centros hospitalarios.

Según la agencia jordana, el propietario y los empleados han sido encarcelados tras el incidente, mientras prosiguen las investigaciones.

Desde comienzos de año se han registrado más de mil casos de intoxicación por salmonella en la ciudad de Zarqa, unos 30 kilómetros al este de Amán, y otros 700 en la localidad de Mádaba, al oeste de Amán, debido a la mala conservación de la mayonesa en estos bocadillos tradicionales árabes.