Han tardado algo más que otros veranos, pero finalmente las retenciones han llegado. Desde principio de este mes las colas en el acceso Algeciras procedente de Tarifa, son kilométricas.

Tan sólo ayer la Guardia Civil de Tráfico informó de que el atasco, que lo habían situado en el nivel dos, se extendía desde el kilómetro 95 al 102 de la N-340. En total siete de kilómetros de espera para viajar entre dos municipios de la comarca del Campo de Gibraltrar, que se hallan a una distancia de a penas 20 kilómetros.

Durante esta semana no se están adoptando las medidas especiales que Tráfico ejecuta los fines de semana, cuando se supone que son más los usuarios que usan esta carretera para disfrutar de las playas tarifeñas. Por ello, los sábados y los domingos, desde media tarde, cuando comienzan a regresar de esta jornada de ocio, se habilita un carril en sentido contrario.

Los propios agentes reconocen que estas retenciones, que hacen que el regreso de Tarifa se convierta en todo un calvario para los conductores, se debe a que esta carretera no es suficiente para soportar tal cantidad de vehículos. Por ello, hasta que no se acometan los últimos tramos de la A-48 entre Verjer de la Frontera, Tarifa y Algeciras no se podrá fin a esta situación.

Esta nueva infraestructura aún no tiene fecha. Así que todos los que visiten el municipio tarifeño y luego pretendan regresar por Algeciras a partir de la media tarde, deberán armarse de paciencia. Estos días un trayecto en el que normalmente no se invierte más de media hora, requiere ahora como mínimo una hora.

CONSULTA AQUÍ TODAS LAS NOTICIAS DE ALGECIRAS