Geroa Bai y EH Bildu han votado este lunes en contra de una declaración de Izquierda-Ezkerra que pide que el Parlamento foral condene la violencia terrorista de ETA y exige su disolución, una declaración que ha sido aprobada al ser apoyada por el resto de grupos del Parlamento foral.

En la Mesa y Junta de Portavoces de la Cámara navarra, celebrada esta mañana, se han votado tres declaraciones relacionadas con la violencia de ETA. Además del texto de Izquierda-Ezkerra, se ha aprobado otro, iniciativa del cuatripartito. Se ha rechazado un tercero de UPN, PSN y PP, sólo apoyado por estos tres grupos, que recordaba que el próximo 11 de febrero es el 'Día en memoria de los desplazados forzosos por ETA y de todas sus víctimas de crímenes contra la humanidad'.

En concreto, la declaracion de I-E dice textualmente que "el Parlamento de Navarra condena de forma rotunda y expresa la violencia terrorista perpetrada por ETA y exige su disolución incondicional".

La presentada por el cuatripartito, Geroa Bai, EH Bildu, Podemos e I-E, recoge que el Parlamento foral "apoyará todo proceso para garantizar la no vulneración de los derechos humanos y exigirá el desarme y desmantelamiento de las estructuras de ETA". En este caso han votado en contra UPN y PPN.

Esta declaración dice, en concreto, que "Navarra ha convivido durante demasiadas décadas con distintas formas de violencia injusta y vulneraciones de derechos humanos, civiles y políticos". "Consideramos imprescindible un compromiso del Gobierno del cambio con la paz, la normalidad y la convivencia democrática e impulsar un plan concebido desde la perspectiva de la gestión integral de la memoria que abarque, por una parte, la violencia del 36 y del franquismo, y por otro, la más reciente en el tiempo, y que esté orientada a favorecer la paz y la convivencia en nuestra sociedad", ha añadido.

El Parlamento de Navarra, "desde el compromiso con la paz y la convivencia", apoyará así "todo proceso encaminado a garantizar la no repetición de las vulneraciones de derechos humanos, exigirá el desarme verificable y el desmantelamiento ordenado, seguro, definitivo y sin condicionamiento político alguno de las estructuras de ETA como organización y la supresión de todas las medidas y espacios de impunidad".

Igualmente, recoge, "el Gobierno adoptará el compromiso de rechazo y condena sin paliativos de cualquier vulneración de derechos humanos o actos de violencia que se produjeran, sea ésta de ETA, de grupos de ultraderecha o de funcionarios del Estado".

"En definitiva, se trabajará por la consecución de una situación en la que la violencia y quienes la han ejercido sean una realidad del pasado y el presente y el futuro estén marcados por la convivencia, la democracia, la libertad y la paz", dice.

Geroa bai:

"gestión integral de la memoria"

En declaraciones a los medios de comunicación, el portavoz de Geroa Bai, Koldo Martínez, ha señalado que han votado en contra de la declaración de Izquierda-Ezkerra porque creen que "tenemos que dar pasos de reconocimiento de que la situación ha cambiado". Según ha dicho, ETA no ha actuado en los últimos años y "es el momento de que todas las organizaciones empezando por la nuestra reconozcamos que los tiempos han cambiado, que se han dado pasos importantes hacia la normalidad y la convivencia".

Ha manifestado que su grupo defiende la "gestión integral de la memoria". Tras indicar que han asistido en las últimas semanas a dos homenajes a asesinados "vilmente" por ETA, Martínez ha indicado que han votado en contra del texto de I-E porque "queremos una gestión integral de la memoria, que este Parlamento asuma que estamos viviendo nuevos tiempos y que los posicionamientos contra la violencia tienen que ser lo más integradores posible".

Por su parte, el portavoz de EH Bildu, Adolfo Araiz, ha manifestado que van a "reflexinar sobre la posibilidad de dejar sin efecto y sin valor" la declaración del año pasado por la que el Parlamento de Navarra considera que ETA ha cometido "crímenes contra la humanidad". A juicio de Adolfo Araiz, esta declaración "no responde al momento político ni a lo que piensa la mayoría política en Navarra". "No responde además a la realidad de los hechos; hablar de genocidio de la izquierda abertzale está fuera de todo lugar", ha opinado.

Sobre su postura ante la declaración de I-E, ha dicho que es una posición "coherente" con lo que han defendido hasta ahora. "Entendemos que hay que ir más allá de la mera condena, hay que hablar de todas las víctimas, de que no se produzcan nuevas vulneración de derechos humanos, hay que renunciar al uso de la violencia para fines políticos y miramos mucho más a futuro", ha añadido, para indicar que es una declaración "insuficiente".

El portavoz de UPN, Javier Esparza, ha manifestado, por su parte, que el hecho de que "un 8 de febrero de 2016 se vote en contra de una declaración que dice que el Parlamento de Navarra condena de forma rotunda y expresa la violencia terrorista de ETA y exige su disolución es intolerable e inexplicable".

A su juicio, "el Gobierno de Navarra no puede presidirlo un partido político que vota 'no' a esta declaración institucional". "No se puede tolerar", ha afirmado.

(Seguirá ampliación)