El plan estratégico para la economía articulado por el Gobierno de Feijóo hasta 2020 contempla la creación de 100.000 nuevos empleos, lo que supondría una reducción del paro hasta el 10%, y que el gasto no financiero de los presupuestos se sitúe en torno a los 9.500 millones. También lograr un crecimiento económico "sostenido" con avances anuales del PIB superiores al 2,5%.

Las cifras las han anunciado este jueves el presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo, y el conselleiro de Facenda, Valeriano Martínez, y aún distan de las alcanzadas por la comunidad (que cerró 2008 con una tasa de paro por debajo del 10 por ciento) antes de verse afectada por la crisis. En cuanto al gasto, también se sitúa lejos de los más de 11.000 millones del último presupuesto aprobado por el Gobierno bipartito.

Sin embargo, en relación con el gasto, Valeriano Martínez ha apostado por incidir en una nueva componente, la de la "reestructuración de la deuda", y ha remarcado que no solo es importante el incremento de los 8.800 millones de las últimas cuentas hasta los 9.500 en el "escenario base" con el que trabaja la administración. "Hay que tener en cuenta que la deuda, al estar reestructurándose ahora, permitirá tener una capacidad de gasto de 120 a 130 millones a mayores en este periodo", ha reflexionado.

Al tiempo, entre los objetivos "bastante ambiciosos" y "profundamente realistas" articulados por el Ejecutivo ha avanzado también la implantación de un paquete de medidas integral para la "revitalización demográfica", de forma que Galicia pueda acercarse "de forma progresiva a la media de 1,59 hijos por mujer que en este momento posee la unión europea".

Entre los retos avanzados por el conselleiro y Feijóo, se sitúa también el de "seguir reduciendo" la tasa de abandono escolar temprano en otros 3,5 puntos, hasta llegar al 13,5% del total; así como lograr que el 47% de los gallegos entre 30 y 34 años de edad tengan estudios superiores, y reducir la población en riesgo de pobreza o exclusión social en un entorno de 100.000 personas.

El plan estratégico, que será remitido al Parlamento gallego para su debate de acuerdo con el espíritu de "consenso" avanzado por Feijóo, también contempla la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero en un 35% en relación con el nivel de 2005; así como aumentar el uso de las energías renovables hasta un 30% del consumo final e incrementar la eficiencia energética con respecto a 2005.

Por último, la Xunta prevé converger 8 puntos con la UE en PIB per cápita hasta llegar al 88% y avanzar casi 5 puntos en relación a España hasta alcanzar el 92,7 por ciento.

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