El consejero de Empleo, Empresa y Comercio, José Sánchez Maldonado, ha destacado este jueves el papel del Consejo Andaluz de Relaciones Laborales (CARL), "prioritario" para la promoción de la negociación y del diálogo social.

Así lo ha puesto de manifiesto en la inauguración del I Congreso Iberoamericano de Relaciones Laborales y Recursos Humanos, organizado por las universidades de Huelva y Sevilla, foro en el que ha asegurado que este órgano de concertación social permanente se ha convertido en "un instrumento esencial" en la labor de "clarificar las nuevas reglas del juego y de dinamizar los procesos que de ellas derivan".

Además, ha remarcado el titular de Empleo, en Andalucía las organizaciones sindicales y empresariales "se comprometen a alcanzar acuerdos en las mesas de negociación para agilizar y reactivar la negociación colectiva en Andalucía".

"Fruto de ello es también, por ejemplo, el cierre de la negociación colectiva andaluza en 2015 con un total de 685 convenios colectivos vigentes, con una amplia tasa de cobertura personal que supera de nuevo el millón de trabajadores y próximo a las 200.000 empresas cubiertas", ha asegurado Sánchez Maldonado.

En materia de mediación en conflictos laborales, el consejero también ha considerado "destacables" los resultados del Sistema Extrajudicial de Resolución de Conflictos Laborales de Andalucía (Sercla) desde sus inicios, subrayando las más de 40 millones de horas de huelga cuya evitación ha sido posible por acuerdos de mediación alcanzados en este tipo de conflictos.

Daño de la reforma laboral

El consejero ha querido analizar las relaciones laborales en Andalucía "sin olvidarnos del papel que en esta materia juegan las reformas laborales a nivel nacional de los últimos gobiernos". Así, Sánchez Maldonado se ha detenido en la última reforma laboral, caracterizada por una "absoluta ausencia de diálogo social".

"Ha sido prácticamente la primera reforma laboral llevada a cabo sin abrir un previo proceso de consulta o de información con las organizaciones empresariales y sindicales", ha apostillado.

Junto a ello, ha añadido el consejero, hay que añadir que dicha reforma "no contempla el posterior desarrollo de su regulación o adaptación a través de la negociación colectiva", como sin embargo se venía haciendo desde la década de los 90. "Su voluntad es, sin duda, debilitar el diálogo social", ha incidido.

La reforma laboral ha transformado estos pilares alterando tres instituciones que son fundamentales para la negociación colectiva. Me refiero a la vigencia de los convenios colectivos en periodos de ultraactividad, la estructura de la negociación colectiva basada en acuerdos sectoriales y la necesaria aplicación de lo pactado en convenio colectivo.