La carretera que las localidades onubenses de La Palma del Condado y Valverde del Camino ha sido el enclave en el que este martes se ha producido el primer caso de muerte por atropello de un lince ibérico en 2016, una situación ante la que la organización ecologista WWF insiste en la "necesidad de actuar" sobre los puntos negros de las carreteras y recuperar la población de conejos para evitar que los ejemplares se muevan buscando comida.

Así lo ha indicado a Europa Press el coordinador de la Oficina Técnica de WWF en Doñana, Juan José Carmona, que ha señalado que lo importante es ver el problema "con una perspectiva temporal mucho mayor". Así, señala que después de un tiempo donde la medidas que se habían tomado y un repunte de conejos "hizo que hubiera menos movilidad por parte de los ejemplares", ahora "volvemos a ver que el conejo ha desaparecido de muchísimas partes de Doñana".

En este sentido, explica que en la última reunión de diciembre los datos que el parque ofreció "eran mínimos históricos" en algunas de las zonas del espacio natural, "y lógicamente cuando no hay conejos, los ejemplares se mueven, sobre todos los jóvenes", insiste el coordinador de WWF.

Por tanto, Carmona asegura que existen dos líneas "sobre las que hay que trabajar mucho". Una, "actuar" sobre los puntos negros en las carreteras, que "se conocen", y otra, recuperar los conejos dentro de los espacios protegidos para que "haya menos riesgo de atropello y otros factores".

En este sentido, hay que recordar que durante 2015 murieron en España un total de 20 linces ibéricos, de los cuales 15 fueron atropellados en las carreteras, según indicó a principios del mes de enero a Europa Press el responsable del programa de conservación de especies de WWF España, Luis Suárez. Esta cifra supone que durante el pasado año fallecieron siete linces menos que el año anterior.

En este sentido, Suárez señaló entonces que continúa siendo "preocupante" la alta mortalidad de linces por atropellos, toda vez que reconoció que aunque se ha avanzado en esta materia, "no lo suficiente", y apeló al "esfuerzo" del Ministerio de Fomento y de las Consejerías del ramo en Andalucía, Extremadura y Castilla-La Mancha para resolver la problemática de los puntos negros de la carreteras, donde "de forma reiterada" mueren los linces.