El Obispado de Solsona lamenta que no acogerá a refugiados porque el Estado descarta a Cáritas

El obispo de Solsona (Lleida), Xavier Novell, ha observado en su última glosa semanal que su Obispado no acogerá a refugiados sirios porque "no quieren venir a España" y porque el Estado ha pactado la mediación con instituciones entre las que no figura Cáritas.
Xavier Novell
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EUROPA PRESS/REMITIDO
Xavier Novell

El obispo de Solsona (Lleida), Xavier Novell, ha observado en su última glosa semanal que su Obispado no acogerá a refugiados sirios porque "no quieren venir a España" y porque el Estado ha pactado la mediación con instituciones entre las que no figura Cáritas.

En la web del Obispado, Novell ha publicado un escrito recogido por Europa Press en el que resume así sus razones por las que, a pesar de que en septiembre pidió a las parroquias que acogieran refugiados, no lo han hecho: "La realidad es que ni los hemos visto ni los hemos podido acoger, dos razones lo explican".

"La primera razón es que no llegan refugiados del Próximo Oriente porque no quieren venir a España. La segunda es que el Estado español ha pactado con tres instituciones, entre las cuales se encuentra una ONG creada por la Conferencia Episcopal Española, pero no se encuentra Cáritas, la acogida legal de estos nuevos refugiados", señala.

El obispo de Solsona ha apuntado la posibilidad de que después de esta acogida legal y financiada quizás se vea a los refugiados buscando ayuda en Cáritas.

Novell ha insistido en que la legalidad internacional establece que los refugiados pueden pedir asilo en el país que quieran y cuenta que Alemania ha recibido durante el año 2015 más de un millón de peticiones.

"España, en cambio, a la espera de saber los datos oficiales, no parece haber recibido mucho más de las cinco mil del año anterior, de entre ellas cuatro mil en las oficinas melillenses, es decir, de los inmigrantes habituales", dice.

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Parroquias se han ofrecido

En septiembre, Novell planteó a todas las unidades parroquiales de su diócesis que sopesaran la acogida de una o más familias de refugiados sirios.

El prelado aseguró entonces que confiaba en que Cáritas diocesana podría asumir el pago de la luz, el agua y la calefacción, a través de los fondos de solidaridad y de ayuda social y, desde entonces, diez parroquias han ofrecido rectorías como alojamientos para refugiados.

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