El líder de Podemos, Pablo Iglesias, ha transmitido al rey Felipe VI en su reunión en la Zarzuela, dentro de la ronda de consultas de cara a la investidura, que su partido está dispuesto a formar un Gobierno "del cambio" con el PSOE e Izquierda Unida que sea "proporcional" a los resultados. En ese Gobierno, él mismo aspira a ser "vicepresidente", según ha anunciado en rueda de prensa en el Congreso de los Diputados.

Al monarca, ha dicho, "le ha parecido una propuesta razonable" dados los resultados electorales. Iglesias ha aseverado que no hay "líneas rojas" en su postura, pero ha enumerado una lista de condiciones y ha insistido en que Podemos sigue apoyando un referéndum en Cataluña. Sí ha insistido en que el nuevo Ejecutivo "debe revertir las privatizaciones", asuma "la plurinacionalidad" y sea paritario, entre otras cosas.

Pese a mostrar su disposición a este Gobierno de coalición, no obstante, el líder de Podemos ha afirmado que no tiene "una gran confianza en los aparatos del PSOE".

El pasado mes de julio, en una entrevista a Europa Press, el propio Iglesias aseguraba que Podemos no formaría parte de un Gobierno que él no presidiera y que no aceptaría ser vicepresidente del líder del PSOE, Pedro Sánchez, o de cualquier otro candidato. Iglesias ha dejado entrever, de hecho, que Sánchez no conocía la propuesta que ha anunciado este viernes y ha insistido en que no quería "filtraciones".

"No se puede esperar a Rajoy" ni a los "juegos parlamentarios", ha comenzado diciendo en su discurso el líder de la formación morada. Sobre la falta de apoyos —positivos o abstenciones— para llegar al mínimo que se requiere en una investidura —en la segunda votación—, ha dicho que "si hay que ponerse de acuerdo con el PNV o ERC" su partido ya ha demostrado "el talante necesario" para recabar respaldos.

Iglesias también ha reivindicado para su formación el Ministerio de Economía: "Es necesario contar con un ministro de Economía que ponga fin a los recortes e impulse empleo"; y ha propuesto cambios en otros: "Nunca más un ministro que reciba corruptos en su despacho", ha sentenciado. También ha mencionado las carteras de Política social y Defensa y cree que Izquierda Unida debería entrar: "Me parecería razonable que ocupara al menos una cartera".

Pablo Iglesias ha dejado caer que las personas con las que ha comparecido en el Congreso de los Diputados, entre las que se encontraban Carolina Bescansa, Iñigo Errejón, el exJemad Julio Rodríguez y el portavoz de En Comú Podem, Xavier Domenech, podrían formar parte de un futuro Ejecutivo porque "les sobra capacidad", aunque no ha entrado en más detalles.

Al rey le ha transmitido, asegura, "que la lealtad institucional es fundamental" para su partido. "Si el PSOE quiere, puede haber un Gobierno del cambio", ha añadido Iglesias, anunciando que si hay negociación, será "televisada, retransmitida, pública y transparente".

Iglesias ha pedido a los ciudadanos que "no tengan miedo y que no se dejen asustar" pese a las informaciones que se han publicado en los últimos días sobre Venezuela y las ha achacado "a una presión que parece que quiere decirle al PSOE que no gobierne y que lo que tiene que hacer es gobernar con el PP y Ciudadanos", ha lamentado.

Ha hecho hincapié en que "la gente ha votado cambio y hay una voluntad mayoritaria en este país que quiere ver un gobierno de cambio, con caras, con rostros, con personas que representen ese cambio". Iglesias ha dicho que la política internacional de un eventual gobierno de coalición entre PSOE y Podemos tiene que estar regida por "la sensatez y el sentido común".

"Estaremos de acuerdo con el PSOE en que si estamos gobernando, tendremos unas magníficas relaciones con Venezuela, Nicaragua, Colombia, Bolivia, Ecuador, Brasil, México y Guatemala... con todos los países hermanos que forman parte de una cultura fundamental para nosotros, independientemente de quien gobierne allí y de quien gobierne en España", ha sostenido Iglesias.

En el caso participar de Venezuela, ha remarcado que las relaciones con cualquier estado de América Latina tienen que ser "buenas" al margen de quien gobierne. En ese posible gobierno entre PSOE y Podemos, el Ministerio de Asuntos Exteriores tendría como objetivo que España fuera "una potencia de la cooperación al desarrollo y el respeto de los derechos humanos".

Iglesias también ha considerado una prioridad "no aceptar las agresiones a la soberanía y a los derechos de los consumidores" que implican acuerdos como los del Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos (TTIP).

Las reacciones a la propuesta que Podemos ha puesto sobre la mesa no se han hecho esperar.

La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha dicho en la rueda de prensa tras el Consejo de Minsitros que es Sánchez quien debe pronunciarse sobre la propuesta, que para ella el mensaje que salió de las urnas es claro y que sigue siendo condición sine qua non que Mariano Rajoy sea el candidato para formar un Gobierno popular. No obstante, ha insistido en que los españoles han de saber si algunos, en referencia al secretario general socialista, están dispuestos a "jugar" con su futuro.

Desde las confluencias que fueron de la mano con la formación morada en las elecciones hay respaldo, tal y como ha expresado la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, en Twitter, y como se ha podido comprobar por la presencia en la rueda de prensa de Iglesias de Xavier Domenech, que algunos ya colocan como titular de una hipotética cartera de "plurinacionalidad":

Por contra, el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, ha acusado a Pablo Iglesias de buscar "un sillón" mientras que su formación opta por "hablar y negociar reformas democráticas, sociales y económicas":

El líder de Podemos ha acudido a la reunión con el rey muy sonriente, con pantalones vaqueros y camisa blanca remangada. Iglesias ha estrechado la mano del monarca en el salón de audiencias mientras le decía: "¿Cómo estás? Encantado".

Cuando posaban para los medios gráficos, le ha comentado en tono distendido el paisaje que se contemplaba desde el coche al llegar al palacio; "He estado viendo los ciervos; ¡Qué maravilla!".

La Casa del Rey ha facilitado imágenes del saludo inicial en su cuenta de Twitter.

El líder de Podemos ha llegado al palacio cinco minutos antes de las 10 horas en un Citröen gris, acompañado por la diputada y dirigente Irene Montero y por su jefa de prensa, quien ha explicado que Iglesias no traía esta vez ningún obsequio para Felipe VI, porque iba simplemente a hablar.

Tras el breve posado ante las cámaras en el salón de audiencias, don Felipe ha invitado al líder de Podemos a acceder a su despacho y, antes de entrar en él, Iglesias ha fijado unos instantes su mirada en un retrato del rey Juan Carlos.

Este mismo viernes, el rey ha recibido al líder socialista Pedro Sánchez (12 h) y, por la tarde, a Mariano Rajoy (17 h).

Una vez concluida su ronda de consultas con los portavoces de 14 formaciones políticas, abierta hace cinco días, el jefe del Estado convocará al presidente del Congreso, Patxi López, para comunicarle el nombre de su candidato a la investidura, que ya nadie duda que será Mariano Rajoy.