Uno de los iconos de la Italia moderna es la Vespa. Por eso, cuando el alcalde de Génova ha intentado prohibir la presencia del mítico ciclomotor en el centro de la ciudad, los motoristas se han sublevado, recoge Il Giornale.

Marco Doria quiere sacar adelante una ordenanza que impida la entrada de ciclomotores al centro de siete de la mañana a siete de la tarde. El motivo son los altos índices de contaminación de la sexta ciudad más poblada de Italia.

Pero aunque la norma sólo se aplicaría a motos fabricadas antes de 1997, los motoristas no aceptan esta medida ante un vehículo tan usado en la ciudad portuaria, donde hay 180.000 conductores de motos. Además, el inventor de la Vespa, Enrico Piaggio, nació en Génova.

Así, el Vespa Club Génova ha puesto en marcha una etiquetas en Twitter, #lamiavespanonsitocca ('Mi Vespa no se toca'') para protestar por la ordenanza.

Estas presiones han logrado, al menos, que se retrase su entrada en vigor. Iba a aplicarse en febrero, pero Marco Doria ha pospuesto su aplicación.