Detienen a una mujer cuando atracaba una oficina bancaria de Vigo y retenía a tres empleadas hasta abrir la caja fuerte

Agentes del Cuerpo Nacional de Policía han detenido por un robo con violencia a una mujer de 50 años con domicilio en Redondela (Pontevedra), a la que sorprendieron 'in fraganti' en el momento en que perpetraba un atraco en una oficina bancaria de Vigo, donde había retenido a tres trabajadoras a la espera de poder abrir la caja fuerte.

Agentes del Cuerpo Nacional de Policía han detenido por un robo con violencia a una mujer de 50 años con domicilio en Redondela (Pontevedra), a la que sorprendieron 'in fraganti' en el momento en que perpetraba un atraco en una oficina bancaria de Vigo, donde había retenido a tres trabajadoras a la espera de poder abrir la caja fuerte.

Según ha informado la Policía Nacional, los hechos ocurrieron a primera hora de la mañana, cuando recibieron una llamada del responsable de una sucursal de Travesía de Vigo manifestando la posibilidad de que se estuviera produciendo un atraco, ya que cuando iba a acceder a la oficina sus compañeras le habían hecho gestos desde el interior para que no entrase.

Varias dotaciones policiales se desplazaron hasta el lugar y se situaron en puntos estratégicos para observar el interior sin ser vistas, mientras que dos agentes de paisano pasaron caminando por delante del banco y observaron que en el interior había una persona que ocultaba su rostro con un gorro y una cazadora de cuello alto y que tres empleadas esperaban al lado de la caja.

Después de comprobar que no había cómplices o vehículos sospechosos en las inmediaciones, dos policías simularon ser clientes y aprovecharon que la atracadora se acercaba a la puerta para pedirle que la abriera, tras lo que se abalanzaron sobre la mujer. Así, le realizaron un cacheo, por el que le intervinieron un cuchillo, las llaves de un vehículo de la marca Audi y otros efectos.

A continuación, los demás agentes accedieron al interior del banco para comprobar el estado de las trabajadoras, quienes indicaron que, cuando se disponían a iniciar su jornada laboral, la atracadora las empujó hacia el interior del cajero —primero a dos y luego a la tercera—.

Tras reconocerle todas ellas que eran empleadas, la mujer les exigió que abrieran la caja fuerte, si bien ninguna tenía la llave, por lo que la mujer las obligó a estarse quietas hasta que llegase el responsable de la oficina.

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