Trabajadores de Limasa han advertido este jueves de que la posible convocatoria de huelga de basura "no va a tardar mucho" debido "a la actitud de la empresa". No obstante, el comité tiene previsto reunirse en los próximos días para tratarlo.

Así se ha pronunciado este jueves el presidente del comité de empresa, Manuel Belmonte (UGT), tras la reunión desarrollada en el Sercla, de la que ha dicho "ha durado prácticamente unos 20 o 25 minutos" y donde las posturas se han mantenido inalteradas.

"Ellos han llegado allí con un conflicto colectivo y nosotros, ante esa posición, entendemos que ya está juzgado y, por lo tanto, no tenemos nada que decir", ha incidido. Por ello, ha afirmado que el comité se reunirá en los próximos días y "si hay que poner la papeleta de huelga, lo vamos a hacer", ha incidido.

Al respecto ha dicho, tras ser cuestionado por una fecha, que están barajando varias posibilidades pero que "no va a tardar mucho por la actitud de la empresa", ha reiterado, ya que la misma "está forzando a la gente con sanciones que son injustificables". Belmonte, en declaraciones a Europa Press, se ha referido a las sanciones que se pone a los trabajadores "por un bajo rendimiento, que no es cierto".

La situación entre trabajadores y empresa se va tensando cada vez más pese a que la sentencia del Juzgado de lo Social número 8 de Málaga, que da la razón a los trabajadores, estableciendo como único convenio colectivo vigente el de 2010-2012, prorrogado hasta la adopción de uno nuevo, derivó en la desconvocatoria por parte de la plantilla del paro indefinido que había previsto a partir del 14 de diciembre.

El problema radica en que cada parte hace una interpretación de esa sentencia. Para la empresa y el Ayuntamiento —propietario del 49 por ciento del accionariado de Limasa—, al establecer el juez que el convenio está prorrogado, da a entender que tiene en cuenta las modificaciones llevadas a cabo posteriormente, lo que evitaría, por tanto, la recuperación exigida por los trabajadores de todos los recortes de los últimos años.

Para los sindicatos, sin embargo, esa frase significa que desde este 1 de enero tenían que empezar a recuperar todos esos derechos y que el punto de partida para negociar un nuevo marco laboral ha de ser el convenio original firmado en 2010. Ante las diferentes interpretaciones, Limasa solicitó, incluso, al magistrado una aclaración de la sentencia; una petición que, sin embargo, fue desestimada.

Tras esto, la empresa mixta ha interpuesto un recurso de suplicación contra dicha sentencia y, además, ha presentado una demanda de conflicto colectivo. Todo ello con el objetivo, según argumenta, de determinar si se debe aplicar el convenio tal y como se firmó en 2010 o con las modificaciones posteriores.

Los trabajadores, por su parte, han solicitado al juzgado la ejecución de la sentencia y el cumplimiento, por tanto, por parte de Limasa del convenio colectivo suscrito en 2010, ya que de no ser así, han advertido tanto a la empresa como al Ayuntamiento, convocarán de nuevo una huelga indefinida.