El pasado año se aprobó el Estatuto del Personal Investigador en Formación (EPIF).  Hasta entonces, los investigadores cobraban una beca de unos 1.000 euros al mes. Ahora, el EPIF ha logrado que la mayoría disfrute de un contrato. Pero si a esos 1.000 euros se le quitan impuestos se queda en los 876 que cobra María.

Son investigadores que logran una beca en la UPV para sacar el doctorado y una vez conseguido, siguen igual. «Sólo pedimos lo que en otras profesiones es normal. Un contrato digno desde el primer día para trabajadores cualificados», explica un portavoz, que prefiere no dar su nombre.

Dinero público tirado a la basura

«Entras a la UPV con 18 años y te paga becas de investigación hasta los 30. A esa edad no puedes más y vas a trabajar a una tienda. Dinero público tirado a la basura», resume un socio de Ikertzaile Prekarioak. Además, estas condiciones no atraen a ningún cerebro foráneo. Esta asociación afirma que invertir en ellos beneficia a la sociedad. Más inf.: www.ehu.es/ikertzaileprekarioak.

LLEGAR A LO MÁS ALTO, PERO NO A FIN DE MES

Ibon Alonso. Becario de la UPV. 30 años.

«No tengo expectativas de lograr un contrato»

«Tengo 30 años, soy investigador de la UPV y cobro 980  euros al mes. Hice Física en la UPV. Me hartó la Universidad y probé la empresa privada. Dos años en un centro tecnológico como becario. La posibilidad de contrato era bajísima, así que pedí una beca para el doctorado en la UPV hace tres años. El trabajo me gusta, pero cobro poco, dependo del jefe para coger vacaciones, no tengo expectativas de acceder a un contrato digno...».