Alertan de un aumento de motoristas muertos en 2015 después de 7 años de descensos

  • Las asociaciones moteras calculan que la siniestralidad de la motocicleta puede haber incrementado un 20% y reclaman inversion y políticas específicas.
  • Con cifras todavía provisionales, el año podría cerrarse con un número similar de víctimas mortales de accidentes de tráfico que el año pasado, alrededor de 1.130.
  • Esto afianza la idea de un "freno" al continuo descenso de las siniestralidad vial.
Un joven de 30 años, que conducía una motocicleta de alta cilindrada a gran velocidad, murió el 25 de mayo de 2013 en Madrid.
Un joven de 30 años,  que conducía una motocicleta de alta cilindrada a gran velocidad, murió el 25 de mayo de 2013 en Madrid.
EFE
Un joven de 30 años, que conducía una motocicleta de alta cilindrada a gran velocidad, murió el 25 de mayo de 2013 en Madrid.

Después de siete años consecutivos de descenso en el número de muertes de motoristas, en 2015 previsiblemente volverán a subir y con fuerza. A la espera de los datos definitivos, que la DGT hará públicos el próximo 4 de enero, las asociaciones moteras auguran un incremento de dos dígitos en los fallecimientos de motoristas respecto a 2014, cuando murieron 187. "Con los últimos datos que manejamos, a mes de noviembre, la cifra estaba incrementandose un 20%", explica Juan Manuel Reyes, presidente de la Mutua Motera.

El año 2015 ha sido particularmente negro para los conductores de motos y ciclomotores casi desde sus inicios. El último fin de semana de enero, de los siete fallecidos que hubo en carretera, seis eran motoristas. Sin embargo, la primera alarma sonó en Semana Santa, entre el 27 de marzo y el 6 de abril, cuando murieron 12 motoristas, frente a los 7 moteros fallecidos la Semana Santa anterior. Y eso que, precisamente, ese periodo de vacaciones descendió el número total de accidentes con víctimas mortales en carretera.

En verano hubo varios fines de semana con numerosos motoristas fallecidos. Entre julio y agosto morían 12 más que el año anterior. De 2 fallecidos en ciclomotor se saltó a nueve y de 37 a 42 entre las víctimas que circulaban en motocicleta de mayor potencia.

Los últimos datos oficiales sobre esta luctuosa estadística son de septiembre, cuando iban 157 muertos, 26 más que el año anterior. Pero en el otoño los partes de fin de semana continuaban mostrando un goteo de motoristas muertos en la calzada. Cuatro y seis, respectivamente.

"Esto viene a ratificar una advertencia que venimos haciendo desde hace años. Sabíamos que cuando pasara la crisis ocurriría", asegura Juan Manuel Reyes, de Mutua Motera. "Y sin embargo, llevamos más de cuatro años sin un plan concreto para mejorar la seguridad vial de la motocicleta. Sin que se invierta nada y sin que se convoque el grupo de trabajo específico de la DGT. La última reunión fue en 2012, y solo para que se presentara la nueva directora, María Seguí. La anterior reunión de trabajo se remonta a 2007", denuncia Reyes.

Desde el Comisariado Europeo del Automóvil, Eugenio De Dobrini también reconoce su "preocupación" por el incremento de los accidentes de los vehículos de dos ruedas, motocicletas y ciclomotores y reivindica que hay que hacer mucho más hincapié en mejorar la seguridad de este tipo de transporte. Para De Dobrini la tarea es básicamente "labor de formación e información".

En este sentido, la asociación Stop Accidentes pone el foco en la necesidad de perfeccionar la seguridad en los guardarraíles. Su presidenta Anna Novella asegura que ha llegado la hora "de cambiarlos todos o de recubrirlos porque quitan vidas y eso se podría evitar".

En Mutua Motera están de acuerdo. "Justo antes de las elecciones se anunció una partida de 16 millones de euros para barreras de contención, pero eso puede dar para 400 o 500 kilómetros de una red de 25.000 kilómetros. Es muy insuficiente", considera. Para ellos el ejemplo a seguir es Portugal, donde los sistemas de protección para motoristas están en todos los guardarrailes "mientras en España solo recubren las curvas consideradas más peligrosas".

En cuanto al cómputo general de accidentes con víctimas mortales, el año está previsto que cierre con un número muy similar de víctimas mortales al 2014, cuando fueron 1.131 (en la estadística oficial a 24 horas). Si bien en verano, durante los meses de julio y agosto fallecieron en las carreteras españolas 225 personas, 5 víctimas mortales más que en el mismo periodo del año pasado, lo que representa un incremento del 2%, en Semana Santa hubo cuatro fallecidos menos (37-33).

Con todo, las cifras hablan de un estancamiento en la reducción de la siniestralidad que llevaba diez años de empinados descensos. La DGT ha achacado en todo momento dicho estancamiento a un incremento en el número de los desplazamientos debido a la mejora de la situación económica y a un parque automovilístico más envejecido. E insisten en que la velocidad excesiva sigue siendo la principal causa de todos los accidentes en carretera.

En los datos provisionales, los últimos disponibles y correspondientes al 20 de diciembre, pues la DGT  siempre cierra la estadística varios días antes de fin de año, siete Comunidades Autónomas habían sufrido incrementos en muertes por accidente de tráfico. Destacaban los aumentos de Cataluña (33 más que en 2014, un 25%) y Castilla y León (28 más, un 24%).

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