El papa pide paz ante las masacres terroristas y la tensión en Tierra Santa

  • Pide el cese de los conflictos en Irak, Yemen y África subsahariana, donde se destruye el patrimonio histórico y cultural
  • El pontífice lamenta durante la bendición 'Urbi et Orbi' que en Tierra Santa continúan las tensiones y las violencias
  • El jueves ofició su tercera Misa del Gallo en el Vaticano.
El papa Francisco, durante la tradicional bendición "Urbi et Orbi".
El papa Francisco, durante la tradicional bendición "Urbi et Orbi".
Alessandro Di Meo
El papa Francisco, durante la tradicional bendición "Urbi et Orbi".

El papa ha reclamado la paz para el mundo durante la tradicional bendición 'Uri et Orbi' (a la ciudad y al mundo) que ha impartido este viernes 25 de diciembre, día de Navidad, en un mensaje en el que ha recordado las "masacres terroristas", la tensión en Tierra Santa o los cristianos perseguidos.

Así, se ha referido a los "atroces" atentados terroristas en las "recientes masacres" Egipto, en Beirut, París, Bamako y Túnez, al tiempo que ha pedido consuelo para los cristianos perseguidos, ante miles de fieles reunidos en la Plaza de San Pedro.

Asomado al balcón de la Logia central de la Basílica de San Pedro, al igual que otros años, Francisco ha repasado las guerras y males que afligen al mundo para pedir la paz, de la que ha señalado que si existe verdaderamente "no hay lugar para el odio ni para la guerra".

El pontífice argentino ha lamentado durante la bendición dirigida a todo el mundo 'Urbi et Orbi' -que solo es impartida en Semana Santa, Navidad y tras la elección de un Pontífice- que en Tierra Santa continúan "las tensiones y las violencias y la paz queda como un don que se debe pedir y construir".

Asimismo, ha enumerado los conflictos en Siria, Libia, Irak, Yemen y en África subsahariana, República Democrática del Congo, de Burundi, del Sudán del Sur, Ucrania y Colombia.

En el mensaje de su tercera Navidad como pontífice, Francisco ha puesto el acento sobre todo en el sufrimiento de aquellos hombres y mujeres que son privados de su dignidad y, como el Niño Jesús, "sufren el frío, la pobreza y el rechazo de los hombres"."Que no falte nuestro consuelo a cuantos huyen de la miseria y de la guerra, viajando en condiciones muchas veces inhumanas y con serio peligro de su vida".

El papa Francisco celebró el jueves por la noche su tercera Misa del Gallo en el Vaticano con la que lanzó a los fieles católicos de todo el mundo un mensaje claro: es necesario mostrar un comportamiento sobrio y sencillo en una "sociedad frecuentemente ebria de consumo y de placeres".

Esta misa tenía un significado especial, pues se celebra en el marco del Jubileo Extraordinario de la Misericordia, y precisamente este fue uno de los valores más defendidos en su homilía, con la que dio inicio a los ritos de Navidad.

"En una sociedad frecuentemente ebria de consumo y de placeres, de abundancia y de lujo, de apariencia y de narcisismo, Dios nos llama a tener un comportamiento sobrio, es decir, sencillo, equilibrado, lineal, capaz de entender y vivir lo que es importante", afirmó Jorge Bergoglio en un discurso ofrecido ante miles de fieles de todo el mundo.

El pontífice subrayó que "en un mundo, a menudo duro con el pecador e indulgente con el pecado, es necesario cultivar un fuerte sentido de la justicia, de la búsqueda" y también "poner en práctica la voluntad de Dios".

"Ante una cultura de la indiferencia, que con frecuencia termina por ser despiadada, nuestro estilo de vida ha de estar lleno de piedad, de empatía, de compasión, de misericordia, que extraemos cada día del pozo de la oración", señaló.

Ofrenda floral

El papa Francisco inició este acto acercándose en procesión al altar, al son del canto de la Kalenda, que en latín recorre desde la Creación hasta la noche en la que nació Jesús, y una vez allí, descubrió e incensió la figura del Niño Jesús, situado a los pies del altar. Tras la celebración eucarística, Francisco lo portó en brazos y lo llevó en procesión hasta el Nacimiento, instalado en la basílica vaticana.

Además, como es habitual, doce niños de todas partes del mundo realizaron un homenaje floral ante la imagen de Jesús.

Este año, los niños que participaron procedieron de países que el papa ha visitado o visitará: Kenya, Uganda, Filipinas, Estados Unidos y también México, a donde Bergoglio viajará del 12 al 18 de febrero.

Concluida la ceremonia, las miles de personas que acudieron al Vaticano pudieron contemplar, en el centro de la plaza, el belén levantado delante del obelisco, que incluye 24 figuras talladas y pintadas en madera, y realizadas a tamaño real.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento