La cremà y su eterno fuego purificador pusieron ayer punto final, un año más, a las fiestas de Hogueras en la localidad vecina de Sant Vicent. Pero antes de que comenzara el último acto de las fiestas, similares a las de Alicante, la jornada derrochó mucha diversión, que comenzó de buena mañana con las despertà en todos los distritos con música y cohetes. Le siguió, por la tarde, un vía crucis acuático, que partió desde la barraca ganadora del primer premio en el concurso de portaladas. A continuación hubo pasacalles en todos los distritos y baile en todas las barracas y racós.