Se acerca la Navidad y las grandes productoras cinematográficas se preparan para estrenar algunas de sus producciones más potentes de cara a los días de fiesta, ¿o no? Lo cierto es que este año, el panorama es algo diferente al habitual. La sombra de una nueva Estrella de la Muerte se desliza lentamente sobre las salas de cine de todo el planeta y los enemigos prefieren huir como Jar Jar Binks ante un ejército de droides.

El próximo 18 de diciembre llegará a los cines Star Wars VII: El despertar de la Fuerza, primera película de una nueva trilogía de la saga galáctica y probablemente el estreno más esperado del año, lo que ha hecho que muchos de sus potenciales rivales en cartelera hayan huido a fechas anteriores o posteriores, puesto que el taquillazo estelar se da por hecho. De momento, la película ya ha logrado batir el récord de venta de entradas por anticipado, y parece que no será el único.

Los motivos de tamaña expectación no son pocos: han pasado ya diez años desde el estreno de la última película de Star Wars (La venganza de los Sith), esta es la primera entrega de la saga de la que George Lucas está completamente desvinculado, el máximo responsable ahora es J.J. Abrams —en quien muchos confían para quitarse el mal sabor de boca de la última trilogía— y regresa el reparto orginal, compuesto por Harrison Ford (Han Solo), Carrie Fisher (Leia) y Mark Hamill (Luke Skywalker), cuyo papel en la película es aún un misterio que ha generado multitud de teorías.

En consecuencia, los estrenos del día 18 son más bien escasos y dirigidos a un público objetivo con, en principio, un perfil muy diferente al de los aficionados a las aventuras jedi. Entre ellos se encuentran el premiado drama británico 45 años; la película sobre los sin techo de Richard Gere, Invisibles; y Sufragistas, cinta protagonizada por Carey Mulligan, Helena Bonham Carter y Meryl Streep, entre otras, que cuenta la historia de las sufragistas inglesas en los albores de la Primera Guerra Mundial.

El resto de estrenos típicos de la Navidad, es decir, grandes superproducciones, películas infantiles e historias sobre el espíritu navideño, se han movido hacia adelante o hacia atrás en el calendario.

Películas hollywoodienses de gran presupuesto y nombres destacados no hay demasiadas este final de año. La más esperada de la temporada tras El despertar de la Fuerza, Los juegos del hambre: Sinsajo - Parte 2, se estrenó un mes antes de Navidad, el 27 de noviembre, aunque es más que probable que siga haciendo unos datos excelentes hasta enero.

El pasado viernes, los directores Steven Spielberg y Ron Howard soltaron su artillería. El primero estrenó El puente de los espías, un thriller protagonizado por Tom Hanks que se desarrolla en la época de la Guerra Fría. El segundo llevó a la salas En el corazón del mar, película de aventuras protagonizada por Chris Hemsworth que relata la historia en la que se inspiró Herman Melville para escribir Moby Dick.

Otro gran cineasta, Robert Zemeckis, ha esperado un poco más para estrenar su última película. Lo hará el mismo 25, día de Navidad, aunque con un título no especialmente navideño: El desafío (The Walk), donde se cuenta la historia de Philippe Petit, un acróbata francés que, en 1974, subió a lo alto de las desaparecidas Torres Gemelas de Nueva York, las unió con un cable y paseó en el vacío durante 45 minutos. La nueva versión de Macbeth, protagonizada por Michael Fassbender y Marion Cotillard, también se estrenará ese mismo día para seguir restándole espíritu navideño a la fecha.

Un poco antes, este viernes 11 de diciembre, Salma Hayek y Vincent Cassel nos traen El cuento de los cuentos, un drama italiano que bebe del lado más oscuro y macabro de las fábulas.

Se ve que hasta el gordito de rojo y blanco ha huido de los sables láser. La única película puramente navideña que se estrena ese día es Navidades, ¿bien o en familia?, una comedia que reúne a cuatro generaciones de una gran familia para hacerles redescubrir, a base de visitas inesperadas y extraños sucesos, la supuesta importancia del espíritu navideño.

El resto de películas con mucha nieve, arbolitos de Navidad y referencias a Papá Noel se han adelantado un poco más. El 4 de diciembre se estrenaron Krampus. Maldita Navidad, una película de terror que gira en torno al espíritu maligno opuesto a Santa Claus, y Los tres reyes malos, una comedia burdamente traducida (el título original es The Night Before) que cuenta la historia de tres amigos de la infancia para convertir la Nochebuena en una fiesta de locura y desenfreno.

Lo mismo sucede con las películas infantiles. Salvo Carlitos y Snoopy, que se estrena el 25 de diciembre, el resto de largometrajes para niños se han adelantado bastante a los días de fiesta con la intención de acumular taquilla durante todo el mes. De hecho, el principal rival del famoso can de las viñetas, El viaje de Arlo, vio la luz el 27 de noviembre.

La cinta de Pixar, que narra la tierna relación entre un niño y un dinosaurio en una realidad en la que estos no se extinguieron, tiene entre sus principales bazas su preciosismo artístico y un nivel técnico hiperrealista en los escenarios. Por otro lado, la cinta de Snoopy, muy alejada del ritmo trepidante de las películas animadas actuales, combina el modelado típico de la animación 3D con técnicas artísticas de la animación tradicional con el objetivo de mantener el espíritu de los largometrajes clásicos.

Otros títulos de animación para niños son Coco, el pequeño dragón (11 de diciembre) y la española El secreto de Amila (23 de diciembre).

En cuanto a cine español, más allá de la imparable Ocho apellidos catalanes, que seguirá acumulando millones (ya lleva más de 20 millones de euros de recaudación), el título más destacado es Palmeras en la nieve (25 de diciembre), una superproducción protagonizada por Mario Casas y Adriana Ugarte que, según Atresmedia, es la película española "de mayor presupuesto en los últimos tiempos".