Dos de cada tres empresas no son sensibles a la contratación de inmigrantes, discapacitados, mayores de 45 años sin experiencia laboral o jóvenes con dificultades.

Así se desprende del balance de resultados del primer año en funcionamiento del programa Incorpora , en el que la Obra Social de La Caixa financia a diversas organizaciones sociales para facilitar el acceso de estos colectivos a un empleo.

Se tuvo que contactar con 395 empresas de Castilla y León para conseguir que emplearan a 175 personas, 74 de ellas en Valladolid. Es decir, sólo uno de cada tres empresarios se mostró dispuesto a ofrecer un contrato.

El sector más receptivo a la iniciativa fue el de la hostelería, y los trabajadores más demandados fueron los inmigrantes. Los técnicos de inserción laboral del programa aseguraron que para el próximo año harán todo lo posible para mejorar la inserción del resto de colectivos.

RUTH MARÍA TAVERAS. Dominicana. 29 años.

«Falta que me suban el sueldo».

«Soy una más en el trabajo. He realizado el curso de hostelería y trabajo en un restaurante. Soy la única extranjera, pero los compañeros me han acogido bien. Sólo falta que mi jefe me suba el sueldo».

DAVID HUANCO. Peruano. 21 años.

«Ahora, espero progresar».

«Asesoraron a mi padre con los papeles de reagrupación, logró que pudiera venir, me dieron formación en informática y ahora imparto clases en la Asociación Rondilla. Espero progresar en mi carrera».