El portavoz del Grupo Mixto, José Sarrión, de IU, ha reclamado este martes al presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, que promueva una reforma del Reglamento de las Cortes para que el reparto de escaños no altere la mayoría de votos que tienen en estos momentos los cuatro grupos en la oposición -728.820 votos frente a 510.951 del PP—.

Sarrión ha considerado esa reforma del Reglamento de las Cortes como "jurídicamente sostenible" y ha propuesto seguir como ejemplo el primer punto del texto 'Por el futuro de todos' promovido precisamente desde el Parlamento regional en el que se recuerda que la mayoría de escaños en el Parlament de Cataluña no se corresponde con la mayoría de votos.

El portavoz del Grupo Mixto ha reclamado la misma consideración para la realidad de Castilla y León que, de aplicarse, impediría casos actuales como que el PP presida las comisiones de investigación constituidas ya en las Cortes en las que es precisamente el investigado, según sus palabras.

Por su parte, el presidente de la Junta ha destacado la "ventaja" y el "éxito" del actual sistema de reparto electoral por su capacidad para favorecer la gobernabilidad frente a los acuerdos en contra como está ocurriendo, según ha lamentado, en el caso concreto de Cataluña.

Del mismo modo y tras ironizar sobre la incapacidad de la oposición para ponerse de acuerdo en asuntos como el destino de los gastos en Castilla y León, Herrera ha recordado a Sarrión que, según el Estatuto de Autonomía, los procuradores se deben a la totalidad de los castellanoleoneses.

Herrera ha acusado a Sarrión de pretender usar la calculadora y ha bromeado con el hecho de que él pretendiese aplicar el cronómetro en las Cortes para exigir más tiempo como le correspondería, al mismo tiempo que se ha preguntado por la opinión de Sarrión respecto a los partidos que, con 61.187 votos, se quedaron fuera del Parlamento regional por no haber llegado al colchón del 3 por ciento de escrutinios.

Finalmente, ha rechazado cualquier planteamiento de la coalición de izquierdas a la que pertenece Sarrión y que atentaría contra la "dignidad" de algunos territorios de Castilla y León en su representación electoral.