El coordinador general de IULV-CA, Antonio Maíllo, ha replicado este jueves a la presidenta de la Junta, Susana Díaz, que es ella "la que tiene que pedir disculpas" por paralizar el proceso de adjudicación de la mina de Aznalcóllar y "retrasar seis meses" su reapertura.

Así se ha pronunciado Maíllo en rueda de prensa, después de que Susana Díaz haya criticado la actitud "irresponsable" de la oposición con este asunto y, aunque se mostró convencida de que la oposición "no va a pedir perdón", les instó a "reflexionar" y a "hacer autocrítica", tras el "daño" que han hecho estos meses.

En este sentido, el líder andaluz de la coalición de izquierdas ha aseverado que "la que tiene que pedir perdón es Susana Díaz" que, según ha recordado, "paralizó el expediente después de ir a anunciar a bombo y platillo las inversiones, pero cuando lo paralizó no fue a Aznalcóllar, como le pidió IU".

Ha señalado que en este proceso han existido "tres contradicciones", por un lado, el adelanto del procedimiento "con fines electoralistas", por otro lado, "su paralización por una instrucción jurídica que no para los procedimientos administrativos", y por último, que "nunca se explicó si esa paralización tenía un anclaje jurídico para justificarla cuando ya se había acabado el plazo de la adjudicación".

"Lo que ha ocurrido en Aznalcóllar, con o sin mezcla jurídica, es que cuando se hacen mal y de manera opaca las cosas, se abren fisuras para que en un concurso en el que hay en juego tantos intereses económicos, la parte perdedora impugne", ha manifestado.

Para IU, "quien tiene que pedir disculpas es Susana Díaz porque ha retrasado seis meses el procedimiento de adjudicación" porque, ha agregado, "si la Junta lo hubiera hecho bien, la activación de la mina se hubiera producido seis meses antes".

De esta manera, Maíllo ha rechazado que, después de que se haya archivado la causa judicial abierta sobre la adjudicación a la agrupación empresarial México-Minorbis de los derechos de explotación del yacimiento minero de Aznalcóllar, la Junta demuestra "una especie de victimismo vinculado a una instrucción judicial", sobre la que IU "nunca se ha pronunciado".

Así las cosas, entiende que "siguen siendo vigentes las chapuzas del procedimiento, el oscurantismo con el que se desarrolló la adjudicación, y que fueron concedidas con unas puntuaciones muy escasas que hubieran exigido un repaso que no se les concedió a los funcionarios por ese mes que se adelantó la concesión".

Y es que, para el también portavoz parlamentario de IU, "no se trata de lo que diga un juez, sino de unas decisiones que han sido unilaterales por un Gobierno que no ha hecho bien las cosas".

"El PSOE-A es el responsable del retroceso de seis meses en el inicio de actividad en la mina", ha aseverado Maíllo para rechazar que ahora, con el archivo de la causa, "convierte un proceso judicial penal en una victoria política".

Por último, ha insistido en que la decisión de paralizar la adjudicación de la mina "no fue una decisión judicial, sino una decisión política", y que "la deslegitimación del proceso no fue por la instrucción judicial, sino que viene cuando se hacen las cosas mal, cuando hay falta de transparencia y de criterio político, y cuando paraliza quien tiene la inseguridad de que las cosas no se han hecho bien", ha zanjado.