El presidente de la Diputación de Ourense, Manuel Baltar, ha evitado pronunciarse sobre su caso en el Parlamento de Galicia después de escuchar acusaciones de "violencia de género" y exigencias de dimisión por parte de los grupos de la oposición.

Baltar ha comparecido en la comisión de economía para exponer las líneas generales de los presupuestos de la institución provincial para el año que viene.

Sin embargo, las intervenciones de los portavoces de PSdeG, AGE y BNG se han centrado, casi exclusivamente, en el reproche a la "pésima imagen" que traslada al organismo provincial tras haber sido denunciado por una mujer que asegura que el presidente de la Diputación ourensana le ofreció un puesto a cambio de sexo.

De hecho, el presidente de la comisión, el socialista Xosé Sánchez Bugallo, ha llamado la atención hasta en tres ocasiones a cada uno de los diputados de la oposición para que se ciñeran al tema, y les ha terminado retirando el uso de la palabra, pese a sus quejas.

Quien sí ha podido utilizar su turno de intervención hasta el final, porque no se ha referido a la polémica generada por la denuncia a Baltar, ha sido el popular Miguel Ángel Santalices, quien ha considerado que con este asunto "se están vulnerando derechos de las personas".

Por su discurso, Santalices ha sido reprobado por el resto de grupos, que entendían que "debería" hacer mención al caso. Además, los diputados de Alternativa y Bloque Juan Fajardo y Tereixa Paz han abandonado la sala en señal de protesta durante el cierre de la comparecencia por parte de Baltar, que solo ha sido atendida por PP y PSOE, además de por los numerosos medios de comunicación que han asistido a esta comparecencia.

"todas putas"

La primera en intervenir tras la exposición de Baltar de los "primeros presupuestos" aprobados por una Diputación este año, ha sido la nacionalista Tereixa Paz quien ha empezado con un "todas putas", frase tras la cual, ha dicho, "se esconde" Baltar "lejos de dar explicaciones".

Ante la atenta mirada del presidente de la Diputación de Ourense, que por momentos ha esbozado una sonrisa y se ha mostrado despreocupado, Paz ha recriminado con dureza su comportamiento después de haber sido acusado de "acoso sexual", un hecho que la ley gallega tipifica como "una de las formas de la violencia de género".

"Esto no es un tribunal de justicia, este es un Parlamento, y aquí se rinden hacen valoraciones políticas", ha advertido la parlamentaria del BNG, antes de ser apercibida por primera vez por el presidente de la Diputación.

A continuación, se ha referido al código ético aprobado por Baltar en el organismo provincial, para ironizar con que "se le debió olvidar notificárselo a sí mismo" y reprochándole una conducta que no respeta la "integridad" ni se merece ser "espejo" de la ciudadanía.

Después de un segundo aviso, ha preguntado al compareciente si cree que responde a la "ejemplaridad" la utilización de los 77 millones de las cuentas para 2016.

"en beneficio propio,

Incluso dentro de la cama"

Por su parte, Fajardo ha acusado a Baltar de "utilizar su cargo en beneficio propio, e incluso dentro de la cama", por lo que le ha instado a tomar la decisión de "abandonar". No en vano, ha comenzado señalando que creía que su asistencia en la Cámara respondería a la voluntad de anunciar su "dimisión" y la "salida de la vida política".

No obstante, y una vez comprobada "la valentía de comparecer como si no pasase nada", el diputado de AGE ha responsabilizado al presidente de la Diputación de tener la provincia en "estado de excepción" con su actuación "deplorable" y de seguir "erosionando la política" con su "continuidad" en el cargo.

Además, a su juicio, si "es grave" el concepto de "relaciones laborales" de Baltar, "más" lo es "aún" que su proceder "sea defendido por el presidente de la Xunta", al que ha afeado unas declaraciones "asquerosas" en que "culpabilizaba a la víctima".

Por ello, ha recomendado que utilice la organización de jornadas para que versen sobre "la defensa de las mujeres" y ha considerado que Feijóo y Rajoy deben "tomar cartas" en este asunto.

Por último, ha lamentado el "papelón" de Bugallo, al que ha censurado por ir contra "el derecho a la libertad de expresión" de los diputados y por estar "defendiendo lo indefendible". "Esto es violencia de género", ha remachado.

"es un cobarde"

Para el socialista Raúl Fernández, mientras, Baltar es "un cobarde" ya que "no dio la cara" en el pleno que él mismo convocó en la institución provincial, donde fue reprobado por la oposición, que pidió su dimisión. "Si le queda algo de demócrata y de coherencia, cumpla esos acuerdos", le ha instado.

Así, ha recriminado a Baltar "absoluto desprecio" por las normas, la oposición, su propio grupo y los ourensanos, y ha expresado su "indignación" y "honda tristeza" por la "pésima imagen" que ofrece del organismo que preside.

"Prefiere usted el silencio, tan locuaz a veces, y el recurso infantil de no comparecer", le ha espetado. A partir del primer aviso del presidente de la comisión, Fernández ha ceñido su discurso a aspectos relacionados con los presupuestos, pero la segunda advertencia ha llegado tras aludir al uso de unas instalaciones provinciales para la celebración del congreso en el que fue elegido presidente provincial del PP.

Después, ha acusado a Baltar de ser "ajeno" a "problemas que afectan a Ourense" como el cierre de escuelas rurales, el transporte y la dependencia, pero Bugallo le ha retirado la palabra.

Declaraciones a la salida de la comisión

Rematada la comisión, Baltar ha respondido a los periodistas en los pasillos del Pazo do Hórreo, donde ha tildado de "muy previsibles" y "nada novedoso" lo escuchado en la comisión.

Al respecto, ha defendido haber hablado sobre presupuestos, que fue para lo que le "invitó el Parlamento" y ha añadido que "si alguno no entiende cuál es su función aquí" no será él "quien le diga lo que debe hacer".

"Ya dije en la Diputación lo que tenía que decir, ya el otro día en un escrito que firmamos todos los diputados dijimos lo que teníamos que decir... Nada más. Y ahora, acciones legales", se ha limitado a subrayar.

Así, ha rechazado hacer de esta polémica una "cuestión mediática" y lo ha definido como "un tema personal", por lo que ha evitado precisar cuándo presentará esas acciones legales.

Incluso, sobre la expectación generada, ha afirmado que "los presupuestos de la Diputación de Ourense siempre levantan mucha expectación" y se ha vanagloriado de que, "por obra y gracia de las urnas" pasó "de ser días antes de las elecciones el presidente con menos tiempo en el cargo a ser en este momento el presidente decano de los gobiernos provinciales de Galicia".

Tampoco ha dicho nada sobre que Feijóo vaya a tener que responder por su caso en el próximo pleno, ni si la voz de los audios difundidos por 'eldiario.es' es la suya, y se ha marchado pese a la insistencia de los medios aseverando que no dirá "nada más que acciones legales" y que eso es lo que sostiene ahora, "mañana y dentro de tres años".

En ourense,

Por la mañana

En la mañana de este jueves en Ourense, el presidente de la Diputación había insistido en que la denuncia constituye "un asunto exclusivamente personal y no se va a debatir estando presente el Partido Popular" en el ente provincial.

"Esto no es un asunto del presidente de la Diputación de Ourense, sino de José Manuel Baltar", ha reiterado el dirigente popular. Preguntado en relación a que la oposición provincial volverá a reformular la propuesta de urgencia para abordar este caso en el pleno, afirmó, tajante: "Es un asunto ya tratado y resuelto, punto".