En una entrevista en TV3, Roures dijo: "Se han dicho demasiadas cosas, no sé si con mala fe, que no son verdad". Remarcó que ha recibido las mismas subvenciones, "entendidas como una ayuda a fondo perdido para favorecer que se haga la película y están reguladas" por el Ministerio de Cultura y la Conselleria de Cultura. "No hay excepciones", dijo.

Roures precisó que las "diferencias" con otras películas son la "negociación" con la Conselleria de Innovación, Universidades y Empresa para que el logotipo de Turisme de Catalunya aparezca en el film y la presentación.

Capital de riesgo

Otra de las "diferencias" es que el Ayuntamiento de Barcelona, a través de su empresa de capital riesgo BCN Emprén, ha invertido un millón de euros, que "recuperará con la recaudación de la película". Esta inversión ha despertado las críticas del PP en el Ayuntamiento de Barcelona.

Jaume Roures dijo que estas inversiones son normales en ciudades como Nueva York y recordó que el Ayuntamiento de Valencia otorga "ayudas directas superiores" a las que se dan aquí, "cosa que me parece muy bien".

Respecto a las críticas por las facilidades por rodar en la calle en Barcelona y los inconvenientes de tráfico que está produciendo, Roures dijo que "la ciudad y el país han de promover estas cosas, que favorecen a hacer un gran spot publicitario de lo que es Barcelona y Catalunya y que verán scien millones de personas".

El rodaje de la película cumple su primera semana y Roures aseguró que "está yendo perfecto, pese a que hay un poco de presión alrededor" y que el director neoyorquino está "muy contento" con el desarrollo. "Todo funciona mejor de lo que pensábamos", añadió.

Roures, que no desveló ningún detalle de la película, dijo que en el film, que se rueda en inglés, habrá un poco de castellano y de catalán, "pero accesorio".