El Gobierno de Aragón desea que Sabiñánigo sea un "referente tecnológico" en la lucha contra el lindano

La IHPA propone investigar cómo terminar con los pesticidas obsoletos porque "no hacer nada aumenta los costes hasta 15 y 20 veces"
Zaragoza acoge esta semana el XIII Foro Internacional sobre HCH y Pesticidas
Zaragoza acoge esta semana el XIII Foro Internacional sobre HCH y Pesticidas
EUROPA PRESS
Zaragoza acoge esta semana el XIII Foro Internacional sobre HCH y Pesticidas

El Gobierno de Aragón continúa trabajando para aislar los residuos de lindano en la antigua fábrica de Inquinosa, en Sabiñánigo (Huesca), y para evitar que los restos de este pesticida contaminen el sistema hidrológico, de forma que se garantice la potabilidad del agua. Además, desea que Sabiñánigo se pueda convertir "en un referente tecnológico" en la búsqueda de soluciones para afrontar este problema.

Así lo ha indicado el consejero de Desarrollo Rural y Sostenibilidad del Ejecutivo aragonés, Joaquín Olona, tras asistir a la inauguración del XIII Foro Internacional HCH & Pesticidas, que se celebra esta semana en Zaragoza y en el que participa la asociación IHPA (International HCH & Pesticides Association) dedicada a la cooperación internacional y el intercambio de experiencias sobre la gestión de pesticidas obsoletos, principalmente en el uso y producción de hexaclorociclohexano (HCH), que es el nombre técnico del lindano.

En declaraciones a los medios de comunicación, Joaquín Olona ha señalado que en la Comunidad "el principal enfoque" es aislar los residuos y evitar que lleguen al agua, dado que aún "no tenemos soluciones" definitivas "técnica y económicamente viables".

En la zona afectada por la contaminación por lindano en Sabiñánigo, "tenemos del orden de 130.000 toneladas de residuos sólidos, más de 3.000 toneladas de residuos líquidos y un millón de toneladas de tierras contaminadas". La presencia de estas sustancias ha causado problemas en el abastecimiento de agua a municipios aguas abajo del río Gállego, que también pasa por esta localidad.

El consejero ha apuntado que se estima que limpiarlas tendría un coste de 3.000 euros por tonelada, algo "auténticamente inabordable, ni con todas las ayudas del mundo" y de ahí la necesidad de desarrollar soluciones tecnológicas nuevas para poderlo realizar".

De esta forma, se ha aislado el vertedero de Bailín "y en Sardas vamos a hacer lo mismo" con el objetivo de "evitar por todos los medios" que esos residuos "lleguen al sistema hidrológico". En caso de que hubiera una fuga, "automáticamente el sistema de control que hay permite detectarla y actuar".

Soluciones a medio y largo plazo

Joaquín Olona ha comentado que las soluciones para este problema se sitúan "en el medio y largo plazo", porque en el corto plazo es aún "inabordable". Ha solicitado cooperación internacional y ayuda financiera del Gobierno de España y de las instituciones europeas "para impulsar este trabajo y el reto de innovación tecnológica" para encontrar una solución definitiva que permita destruir los residuos.

En este punto, ha observado que la búsqueda de soluciones a este problema puede ser también "una gran oportunidad para el desarrollo tecnológico y para la innovación en Aragón" y en "veinte o treinta años" podría hacer que Sabiñánigo sea "un referente tecnológico en la solución de estos problemas que sufren muchísimos países del mundo".

A su juicio, "la apuesta tiene que ser múltiple", basada en la tecnología y con la aplicación de métodos químicos, microbiológicos y biológicos y ha comentado que ahora, en el marco del proyecto Life Discovery, se ensaya en Aragón una técnica de oxidación in situ, limpiando el sustrato del acuífero, "pero hará falta desarrollar otras técnicas" para combatir estos productos que "son fácilmente transportables a través de la atmósfera y del agua" y que no limitan sus afecciones al lugar donde se producen.

Está mezclado

Olona ha apuntado, además, que en Aragón "el problema que tenemos" es que los residuos líquidos son "una mezcla de bencenos, clorobencenos, fenoles, polifenoles, que hace muy complicado el tratamiento".

Estas sustancias son "peligrosas" y con un potencial de contaminación "tremendo", que dificulta mucho las labores para su control y eliminación. Por ello, "lo que se buscan son técnicas para que estos compuestos químicamente complejos se rompan y convertirlos en productos más sencillos y menos tóxicos", ha dicho el consejero.

Asimismo, ha recordado que el Ejecutivo aragonés inició en 2014 el procedimiento judicial para ejecutar la sentencia que condena a la empresa Inquinosa a pagar una indemnización por responsabilidad civil de 15 millones de euros y, en paralelo, se está actuando judicialmente para poder ocupar los terrenos de la compañía y desmantelar las instalaciones.

Sobre el foro, Joaquín Olona ha comentado que congrega a más de 150 expertos de 35 países, lo que pone de manifiesto que "estamos ante un problema mundial y que lo que hacemos en Aragón es objeto de interés internacional".

Un trabajo excelente

Por su parte, el director general de IHPA, John Vijgen, ha elogiado el trabajo que se ha desarrollado en esta Comunidad para combatir estos pesticidas. "Aragón ha hecho un trabajo fantástico", ha resaltado, para coincidir en que ahora se trabaja para evitar filtraciones de residuos líquidos en el río Gállego.

Ha apostado, en el largo plazo, por convertir la zona de Sabiñánigo en un nuevo núcleo industrial "con un estudio socioeconómico adecuado de qué necesita esta región y sus ciudadanos".

Tanto en esta Comunidad, como en País Vasco o Galicia en los años 80 y 90 "se ha hecho un trabajo excelente", si bien Vijgen ha exigido mayor implicación de la Unión Europea para limpiar estas zonas porque "esto cuesta dinero" y hay que tener en cuenta que "nos llevará décadas y décadas eliminar todo el pesticida obsoleto" en el mundo. También ha solicitado que se indemnice a las zonas que han sufrido daños por el uso de estos pesticidas.

Vijgen ha comentado que podría haber hasta "tres o cuatro millones de toneladas en el mundo" de estas sustancias, una cifra "que ni siquiera conocemos con exactitud" y ha precisado que cuando se producía lindano, "por cada millón de toneladas, se generaban de ocho a diez millones de residuos como consecuencia de la producción", un problema que afecta a países como Rumanía, Alemania o India, y que genera "miedo" a tratar estos productos "porque son peligrosos y producen muchas emisiones".

Abaratar costes

Como ejemplo, ha detallado que en Suiza se emprendió la limpieza de una empresa naval, "pero tras seis meses de trabajo el Gobierno lo paró porque generaban muchas emisiones". La inversión prevista era de 50 millones, "pero ya se han gastado cien millones" y aún no lo han conseguido.

Vijgen ha explicado que "el gran potencial" de los trabajos de limpieza es reciclar el HCH y convertirlo en cloro puro, de forma que se pueda reutilizar en la industria química y reducir los costes de estas operaciones, dado que el precio del reciclaje "es de 3.000 euros por tonelada" y, para ello, "hay que seguir investigando".

Ha advertido de que no afrontar el problema y "no hacer nada" aumenta los costes "hasta 15 y 20 veces", para exigir nuevamente la implicación económica de la Unión Europea en la lucha contra estos residuos.

En la presentación del foro, ha expuesto como ejemplo la situación de Kirguistán, donde el ganado ha estado pastando en zonas contaminadas y ha terminado falleciendo, llevando los pesticidas a toda la cadena alimentaria.

En el foro, se han abordado los casos de otros países como Bielorrusia, con un centro de reciclado que permite tratar sus residuos, y los de otros países de la antigua URSS; Vietnam; Tayikistán o Moldavia, entre otras experiencias y debates que se tratarán en los próximos días.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento