Del clan sólo faltaba ella por grabar disco, y acaba de hacerlo: Soleá Morente acaba de publicar Tendrá que haber un camino. El punto en el que la pequeña de los Morente se encuentra: buscando, "algo habrá". De ahí a este trabajo con el que debuta, y reconoce que si lo llega a pensar mucho no lo hace. Lo más duro: estrenarse sin su padre. Y ahí justo se le quiebra la voz.

¿Cuesta mucho dar el paso?

Más si lo piensas, que si te remangas y te pones a trabajar...

Porque si lo llega a pensar...

He dado un par de vueltas y viendo que me pasaba por aquí dentro.

¿Y qué pasaba?

Cosas muy importantes que necesitaba expresar.

¿La que más le importaba contar?

Lo que más trabajo me costaba era encontrar una etiqueta para decir: yo soy Soleá y hago esto. He merodeado alrededor de una idea de hacer las cosas con un nombre, y no lo he encontrado, sólo he podido hacer lo que me hace sentir bien y cantar las canciones que me liberaban. Y me dije: pues tendrá que haber un camino.

¿Y así se siente, en búsqueda?

Sí, buscando algo que no sé qué es.

Buscaba como Soleá, sin Morente, ¿pesa mucho el apellido?

Es una responsabilidad viniendo de una familia como la que yo vengo, que es que no se puede cantar mejor. Mi padre decía que la que mejor cantaba es mi madre. A mí también es la que más me gusta.

Cuando decidió hacer Filología Hispánica ¿lo hizo por distanciarse un poco de la música o era vocacional?

Siento un amor profundo por la literatura que mi padre nos inculcó. A él le habría gustado, y me dijo que la hiciera, porque en casa no había hecho nadie una carrera en la Universidad. Me dijo mi padre que se había quedado con las ganas de hacerlo y se venía a veces a escuchar a clases.

¿Cuánto hay de esa filóloga en su música?

Cuido mucho el texto, es fundamental, aunque se digan cosas sencillas. Ser sencillo, no simple. Cuido mucho la literatura de las canciones. Mi padre siempre ha dicho que el texto es el 50% de las canciones. Y cada vez me preocupo más por estudiar guitarra y piano, canto.

¿Qué siente cuando canta?

Siento una liberación, necesito hacerlo, no sé por qué lo hago, pero me siento bien. A veces me pongo nerviosa, sobre todo antes de cantar, el pellizco que me da..., las piernas me tiemblan. Cuando ya toca...

¿Y qué hace?, ¿cierra los ojos?

Respiro y pienso que es lo que quiero y lo mejor que me pueda pasar en la vida.

¿La canción más parecida a usted?

Todas, pero Todavía es muy positiva y alegre. De ilusión, ambición y curiosidad y así me siento yo.

¿Qué le dice su hermana? Porque su música es distinta, se ha despegado usted...

Sí, de forma natural he ido buscando colores que me ayuden a construir mi propio universo.- El flamenco lo tengo ahí y mis raíces son esas y a través de ellas voy hacia otros lugares. Es lo que me gusta y de lo que vivo pero he decidido investigar otros modos de música. Decimos lo mismo, pero de otra manera. Es hablar del amor, lo que ocurre, pero buscando nuevos modos de decirlo. Intento elegir lo que voy necesitando y contárselo a la gente,

¿Le preocupa lo que ocurre alrededor?

Veo que todo va muy rápido, que hay demasiadas cosas, se me escapa el entender lo que está pasando en el mundo. Muchas nuevas tecnologías. Tengo la sensación de que hay que estar muy alerta a lo que está pasando.

Cuando escucha el término nuevo flamenco, ¿qué piensa?

No me gustan las etiquetas que intentan definir de modo exacto. Prefiero moverme entre la libertad.

Doloroso publicar el primer disco y que no esté su padre...

Eso sí me está costando, es lo que más me está costando, porque me da hasta miedo pensar todo lo que le echo de menos. Si me paro a pensar que no está... He pensado en él en todo momento y he cantado pensando en mi padre. Me acuerdo desde que me levanto hasta que me acuesto. Es duro, me gustaría que estuviera aquí. Lo llevo conmigo pero... Es muy duro. Me ha costado.

¿Qué es lo que más le importa no perder, mantener?

No temo perder la perspectiva, tengo claro que he hecho unas canciones de todo corazón..

¿Y le desnuda?

Sí, me desnuda mi música, está puesta mi alma, si no lo haces así, entregándote el corazón, no sirve de nada.

¿Algún consejo que siga siempre de su familia y alguno que no?

Uno de ellos. Mi padre siempre nos dijo que nos formáramos, y que nunca hiciéramos lo que los demás nos digan sino lo que a nosotros nos gusta. Y el que no he seguido no lo digo que mi madre...

Difícil...

Siempre ha habido algo que ha querido dominar al otro.

Es muy tímida...

Sí, pienso mucho lo que digo y me como la cabeza. Y me parece que digo demasiadas cosas. Estoy contactando conmigo también.

¿Se siente la más distinta?

No, me siento yo misma, y cada uno tiene lo suyo en mi casa. Estrella es que puede hacer lo que le da la gana.

Bueno, y usted...

Yo no lo sé, no me lo planteo.

¿A qué lugar quiere llegar?

No sé lo qué pasará, sólo que ligada a la música y a la literatura. No sabes dónde te puede llevar la vida. Hacer un doctorado me gustaría.