Los trabajos de cimentación y los encepados de hormigón de la nueva planta de Campofrío en la capital burgalesa, cuyo inicio de actividad se ha fijado a finales de 2016, ya han finalizado, según ha informado la compañía a través de un comunicado recogido por Europa Press.

A partir de ahora las intervenciones se centrarán en levantar la estructura que soportará la futura fábrica, construida en la misma ubicación que la factoría siniestrada el 16 de noviembre de 2014 por un devastador incendio.

El proyecto de construcción de la nueva planta de Campofrío en Burgos, cuya primera piedra se colocó el pasado 16 de septiembre en un acto en el que participaron los 600 trabajadores de la fábrica, cuenta con un presupuesto cercano a los 225 millones de euros.

La colocación simbólica de la primera piedra corrió a cargo de seis trabajadores, en representación de toda la plantilla, que colocaron seis ladrillos personalizados y elaborados con las cenizas de la antigua fábrica, que se distribuyeron entre los 848 trabajadores de la misma como elemento conmemorativo.

La planta, con una capacidad productiva superior a las 100.000 toneladas anuales, se dividirá en cuatro zonas principales, de materias primas, curados, cocidos y loncheados, y dispondrá además de una amplia zona de expediciones desde la que se distribuirán más de 120 millones de paquetes individuales de loncheados el primer año.