«No pienso en esto como en un hito científico, sino en que ahora tengo dos hijos preciosos». Ramona, una valenciana de 40 años, ha sido la primera mujer en dar a luz en España tras someterse a un nuevo método de conservación de óvulos llamado Cryo-top, que los vitrifica (los congela tras extraerles el agua).

La ventaja es evidente para mujeres como ella. A su edad, la estimulación ovárica daba de dos a tres óvulos, una tasa muy baja para lograr embarazos. Esta nueva técnica permite conservarlos el tiempo que se desee. Cuando reunieron 11 se los implantaron, con un excelente resultado: una pareja de mellizos.

Vieron la luz el pasado 23 de mayo, en Valencia. Francisco pesó 2,5 kilos, y su hermanita Lucía, 2,3. A la alegría del nacimiento se une el hecho de que Ramona no tenía más hijos. «Se lo aconsejo a todo el mundo», dijo ayer en la sede del Instituto Valenciano de Infertilidad (IVI) , algo impresionada por los flashes y la expectación despertada.

Ya se han logrado 50 embarazos, y han nacido otros 14 niños más fruto de esta técnica, la mitad en la Comunitat.

Una técnica que iguala a ellos y ellas

La nueva técnica impulsada por el IVI tiene tres usos: disponer de óvulos propios tras un tratamiento contra el cáncer, crear un banco para donaciones y alargar la fertilidad de la mujer para que pueda ser madre hasta los 50. Este último iguala, según el director del IVI, José Remohí, a ambos sexos, ya que las mujeres «juegan siempre contra el calendario», y el semen se puede congelar desde hace décadas. Vitrificar óvulos cuesta unos 1.200 euros.