Casi dos tercios de los valencianos (un 64 por ciento) asegura utilizar preparados de plantas medicinales para prevenir o tratar afecciones, según un estudio del Centro de Investigación sobre Fitoterapia (Infito) en el que han participado ciudadanos de esta autonomía. Más de la mitad de los valencianos (56 por ciento) dice preferir la farmacia para adquirir las plantas medicinales, aunque sólo una cuarta parte lo hace en realidad.

El vocal de Fitoterapia y Plantas Medicinales del Muy Ilustre Colegio Oficial de Farmacéuticos de Valencia Ricardo Folgado ha destacado que la dispensación de medicamentos de plantas medicinales "solo se pude realizar desde la oficina de farmacia para que el paciente tenga plena confianza de que los productos fitoterapéuticos cuentan con todas las garantías de calidad y seguridad".

Asimismo, ha añadido que el farmacéutico es "el profesional que mejor puede orientar al paciente sobre la interacción que pueda causar algún preparado a base de plantas medicinales con la medicación habitual del paciente".

Este especialista agrega que "la proximidad del farmacéutico con el paciente, así como su completa formación en Farmacognosia y Fitoterapia convierte a este profesional sanitario en la persona clave para aconsejar cuando es recomendable el empleo de medicamentos de plantas medicinales y en qué situaciones no es aconsejable si se trata de un paciente polimedicado".

Infito ha puesto en marcha la campaña 'Yo elijo plantas de farmacia' para apoyar el papel de las boticas en la dispensación de plantas "e igualarnos a los países de nuestro entorno, en los que la farmacia es casi el único canal de distribución de preparados de plantas medicinales". La campaña incluye una línea de teléfono de apoyo al farmacéutico, materiales formativos, disponibles en la web infito.com y charlas en los órganos colegiales que lo soliciten. Para los pacientes, se incluye una guía de plantas medicinales y sus indicaciones, así como una aplicación gratuita para móvil y tablet.

"Las plantas medicinales por sus principios activos ayudan a curar o paliar diversas enfermedades y trastornos leves y moderados. Sin embargo no hay que abusar de ellas y siempre que el paciente esté tomando otros medicamentos hay que pedir consejo al farmacéutico porque estos fármacos podrían interaccionar entre sí", ha apuntado Folgado.

Aumento en ventas

El consumo de plantas medicinales en la farmacia experimentó un crecimiento de un 10 por ciento en el último año, según un estudio de Infito basado en datos de IMS. El insomnio y la ansiedad es tradicionalmente el principal grupo terapéutico para el que más plantas medicinales se consumen y uno de los que más crece: un 27 por ciento. La valeriana, la pasiflora o la amapola de California ayudan a combatir de forma natural los trastornos del sueño.

Según datos de Infito, el 89 por ciento de los valencianos preferiría tomar preparados de plantas medicinales antes que medicamentos de síntesis para combatir el insomnio.

Otro de los grupos terapéuticos con más demanda de plantas medicinales en la farmacia son los resfriados, con un crecimiento del 23 por ciento anual. Entre las plantas más dispensadas en este grupo destacan la echinácea y el própolis. "Los pacientes demandan sobre todo preparados fitoterápicos para alteraciones del sistema nervioso, insomnio ocasional o resfriados. La echinácea es una planta muy eficaz para la prevención y el tratamiento de los resfriados y los procesos catarrales", ha recalcado Folgado.