Los nueve miembros del jurado deliberan ya en secreto sobre la muerte de Asunta Basterra

  • Este lunes a mediodía han comenzado las deliberaciones.
  • El presidente del tribunal ha entregado al jurado el objeto del veredicto: 21 preguntas que tendrán que debatir y votar y que se refieren a los hechos.
  • Para que un hecho se considere probado o no hacen falta al menos siete votos "cuando fuesen contrarios al acusado" y cinco votos cuando fuesen favorables.
  • Después, si hay una mayoría necesaria en la votación sobre los hechos, se votará la culpabilidad o inculpabilidad de cada acusado por cada hecho delictivo.
Rosario Porto durante la primera sesión del juicio por el 'caso Asunta'.
Rosario Porto durante la primera sesión del juicio por el 'caso Asunta'.
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Rosario Porto durante la primera sesión del juicio por el 'caso Asunta'.

El jurado popular encargado de dar un veredicto en el juicio por el crimen de Asunta Basterra inició este lunes a mediodía sus deliberaciones. Son nueve personas, están incomunicadas y lo que hablen entre ellas es secreto.

Tienen que determinar sobre la culpabilidad o no de la abogada Rosario Porto y el periodista Alfonso Basterra, padres de la menor de 12 años encontrada muerta el 22 de septiembre de 2013 y únicos acusados de la muerte.

Deben contestar a las 21 preguntas que les ha entregado por escrito el presidente del tribunal, Jorge Cid Carballo, que constituyen el llamado objeto del veredicto y en el que las partes, acusaciones y defensas, han realizado sus aportaciones durante varias horas. Las preguntas están redactadas con lo hechos justiciables como base.

Si algún jurado tiene dudas puede solicitar, por escrito, la presencia del presidente del tribunal. En cualquier caso, si a los dos días de deliberaciones el jurado no entrega sus respuestas, el presidente les convocará.

Éste ya les ha informado de que, si tras la deliberación no les hubiese sido posible, por ejemplo, resolver las dudas que tuvieran sobre una prueba, deberán decidir en el sentido más favorable al acusado.

El jurado tiene que contestar lo que se les ha preguntado por orden. En cuanto a la votación, para que un hecho se considere probado o no, hacen falta al menos siete votos "cuando fuesen contrarios al acusado", y cinco votos cuando fuesen favorables.

Según la ley, después, "si se hubiese obtenido la mayoría necesaria en la votación sobre los hechos, se someterá a votación la culpabilidad o inculpabilidad de cada acusado por cada hecho delictivo imputado". El jurado deberá motivar cada una de sus respuestas en función de lo oído y visto en el juicio.

Cid ha agradecido este lunes a los miembros del jurado el desempeño de su cometido durante las cuatro semanas que ha durado el juicio y les ha pedido ahora "responsabilidad, imparcialidad, independencia y sujeción a la ley" a la hora de rematar su labor, dada la "gravedad de la tarea que se les encomienda".

"Su comportamiento ha sido exquisito en cuanto a puntualidad, responsabilidad y sentido del cumplimiento del deber, un deber nada agradable", ha manifestado.

También y les ha recordado que su labor hasta la fecha era escuchar y ver las pruebas, y, en este momento les toca ser "responsables" porque está en liza "la vida de dos personas que se juegan muchos años de prisión".

El padre de una testigo pide amparo

Por otro lado, el padre de una testigo del caso se ha dirigido en una carta pública al ministro de Justicia, Rafael Catalá, "y a la opinión pública", pidiendo amparo por el trato recibido del abogado de la defensa de Rosario Porto.

Andrés Pámpano es el padre de la profesora de música que testificó el pasado 7 de octubre y, en su carta, denuncia que el abogado José Luis Gutiérrez Aranguren "se inventa un sentimiento hostil de la profesora, en la que vio 'un odio que era patente', odio que nadie más que él en la sala vio".

Para el progenitor de la profesora, en las sesiones diarias que el abogado mantiene con los medios de comunicación, "ha vertido juicios de valor, atribuciones y descalificaciones a testigos, testigos a los que el ruido interesado puede afectar a su honor o imagen social".

Entre las frases del defensor que recoge el padre se afirma que aquel dijo que "hay dos tipos de testigos, los que vienen ya preparados y ya condenaron desde el mismo día de la desaparición de la niña a los padres... y los que vienen a contar la verdad", por lo que le pregunta al ministro por los derechos de los testigos.

También expresa su pesar porque el abogado haya distinguido a testigos, como el director de la cárcel, del que el letrado, según el padre, ha dicho que "no tiene interés en perjudicar o beneficiar a nadie", mientras que otros, siempre según el entrecomillado del autor de la misiva, "vinieron aquí a hacer afirmaciones totalmente gratuitas".

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