El consejero municipal de Economía y Cultura del Ayuntamiento de Zaragoza, Fernando Rivarés, ha criticado que la "extraña alianza" del PSOE con el PP, a la que también se ha sumado Ciudadanos (C's), ha hecho que se aprueben unas ordenanzas fiscales que "impiden recaudar más y bloquean la gestión de un gobierno colapsado e intervenido tras años de alguna locura financiera y unos presupuestos infradotados para atender deudas que crecerán año tras año".

Rivarés se ha referido al punto de fricción entre Zaragoza en Común (ZEC), que buscaba gravar más en el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) a los grandes comercios, con valor catastral superior a los 230.000 euros, que luego redujo a los de 500.000 euros al atender una propuesta de CHA y que al no contar con el apoyo de PSOE, PP y C's que se mantenían en el umbral del millón de euros lo ha intentado negociar en los 750.000 euros, pero sin éxito.

Uno de los ejemplos que ha expuesto para criticar las ordenanzas aprobadas supone que un comercio, situado en el paseo de Pamplona, de 730.000 euros de valor catastral, bajará el IBI un 19,7 por ciento y en el paseo de Fernando Católico, a otro de 400.000 euros, bajará un 15,9 por ciento, 150 euros mensuales. Ha añadido que un gran "comercio muy verde, muy verde en su etiqueta dejó de pagar 600.000 euros en 2014 por las bonificaciones"

En su intervención en el Pleno, Rivarés ha explicado que con la propuesta de ZEC se pretende "compensar locura del catastrazo de 2013 que toma la referencia de 2008 y supera los valores del mercado, pero se niegan a recaudar más dinero en sociedades mercantiles y grandes firmas comerciales", ha lamentado.

El consejero municipal ha subrayado la actitud negociadora del equipo de gobierno porque "en virtud del acuerdo hemos aceptado propuestas de otros grupos", entre las que ha citado el IBI comercial que defendía CHA o el IBI residencial general que supondrá reducir el tipo en un 21,7 por ciento, como proponía el PSOE o las reducciones en el impuesto de plusvalía por 'mortis causa', que serán de hasta el 95 por ciento para inmuebles de hasta 100.000 euros de valor catastral, a instancias del PP.

Tras apuntar que con la ordenanzas fiscales aprobadas se recaudarán unos 3,5 millones de euros más frente a los 20 millones previstos por el equipo de gobierno de Zaragoza en Común (ZEC), Rivarés ha manifestado que "no nos gusta casi nada, nos gusta más la propuesta inicial como gobierno y casi nadie piensa que ésta —la aprobada en Comisión— es la mejor".

Por ello, ha hecho un llamamiento al acuerdo "progresista que permita recaudar más dinero de quien más tiene para pagar la deuda que nos hemos encontrado, mantener unos servicios infradotados y hacer una política para la mayoría que es cultural y de derechos sociales".

REGRESIVAS

En contraposición a la política de ZEC, Fernando Rivarés ha detallado que la del PSOE "mantiene la recaudación, pero no la presión fiscal porque aumenta en las rentas más bajas por la progresión del catastrazo y bajan el IBI a las rentas más altas", al exponer el dato de que "puede bajar en un 27 por ciento, mientras que en las más modestas puede subir un 5 por ciento "por el efecto perverso del catastrazo de 2013".

Rivarés ha lamentado que la propuesta de ZEC "siendo la más progresista no tiene votos suficientes y no se por qué", se ha preguntado para criticar que el IBI ha subido un 60 por ciento en los últimos años. "No soy capaz de entender la postura del grupo municipal del PSOE, a no ser que tenga que ver con una sensación de grupo minoritario o que desee bloquear al Gobierno de la ciudad o que las siglas importan más que la ciudad".

Tras esta exposición ha demandado a los grupos del PSOE, PP y C's que expliquen "cómo se paga la enorme deuda, se mantienen los servicios básicos que han sido infradotados y cómo se hace política para la mayoría" para apostillar "o es que hay otros intereses que defender distintos a los de Zaragoza".

Entre los pagos a los que tiene hacer frente el Ayuntamiento figuran los 18,5 millones de Zaragoza Alta Velocidad (ZAV), los 45 millones en sentencias condenatorias al Consistorio, 8 millones paga extra la extra de Navidad de 2012 y otros 45 millones más a pagar en 2016 por la deuda de TUZSA, empresa a la que "dedicaron más de 2 millones para pagar despidos" o los 200 millones del tranvía que según el informe de Eurostat computan a deuda, ha referido el concejal.

Tras esta exposición, Rivarés ha retado al grupo municipal del PSOE a que "ahora expliquénlo, si pueden, a sus votantes" para dejar constancia de que "estamos muy orgullosos de nuestra capacidad de negociación y henos llamado al PSOE porque en algunos principios de la socialdemocracia llegaríamos a acuerdos, pero en el umbral del millón de euros no ha sido posible", ha lamentado.

Rivarés ha concluido al afear que "han conseguido pasar unas ordenanzas regresivas porque otros —por el PSOE— no se han bajado de la burra y Zaragoza ha perdido".