En la propuesta, consultada por Europa Press y que ya ha superado las 400 firmas, un grupo de entidades y profesionales vinculados al mundo del Derecho y de la Universidad en general ha querido tener en consideración la "amplia trayectoria universitaria, académica, jurídica y social" del profesor Alarcón.

"Entendemos que el mismo ha representado a lo largo de toda su vida una figura que ha desplegado un papel destacado e influyente en el ámbito sevillano", subrayan, para afirmar a continuación su "plena" adhesión a una iniciativa dirigida al Ayuntamiento de Sevilla para que una vía de la ciudad pueda llevar su nombre.

Manuel Ramón Alarcón, fallecido a los 70 años, inició su andadura docente como profesor adjunto numerario en la Hispalense en 1968. En 1987 obtuvo la plaza de catedrático de la misma especialidad jurídica en la Universidad Autónoma de Barcelona, para trasladarse en 1991 a la Universidad Pompeu Fabra. En 1994 regresó a la Universidad de Sevilla y en febrero de 2010 fue nombrado magistrado de la Sala de lo Social del Tribunal Supremo.

Durante su fecunda trayectoria académica ostentó diferentes cargos académicos tanto en las dos universidades catalanas de la que fue catedrático como en la Universidad de Sevilla. En la US fue director del Departamento de Derecho del Trabajo y la Seguridad Social y decano de la Facultad de Derecho. En 2004 se presentó a las elecciones a rector de la Hispalense.