Física Cuántica y Biodanza. A pesar de que estos dos conceptos se encuentren muy alejados en cuestión de origen, entre ellos existe un nexo de unión que permite descubrir "un mundo nuevo de sensaciones, experiencias y vivencias" para percibir "la realidad de forma distinta". Éste es uno de los objetivos del taller que este fin de semana se realiza en el Centro Salvatorianos de Logroño de la mano del profesor universitario de Física Cuántica y didacta de Biodanza, Mauro Rotenberg.

Desde ayer, un grupo de treinta personas participan en un taller teórico y práctico en donde estos dos términos se unen para conocer "una nueva forma de percibir y actuar en el mundo diferenciando conceptos como certeza o posibilidad". Con Rotenberg también se encuentra el didacta y director de la Escuela de Biodanza SRT de Zaragoza, Augusto Madalena. Ambos ofrecerán a sus alumnos técnicas para el desarrollo personal y la mejora de la autoestima.

En declaraciones a Europa Press, Mauro Rotenberg ha señalado que la física cuántica y la biodanza están relacionadas "en el apartado de las posibilidades". Se trata de mostrar la diferencia entre "certezas, probabilidades y posibilidades" y, en este sentido, la biodanza se centra en ésta última porque "siempre sabemos cómo empieza todo pero no cómo acaba, no hay certezas".

Así, ha detallado, este taller pretende sensibilizar en la idea de que "uno está cambiando constantemente" y "la incertidumbre forma parte de nuestra vida" pero ésta también "ofrece oportunidades". Por ello "no hay nada certero sino que existen posibilidades que son las que harán girar nuestro desarrollo y cambiar nuestra realidad".

Gestionar esas posibilidades de forma correcta es el fin de este taller y para ello la física cuántica ofrece tanto en la teoría como en la práctica también esas nociones para llevarla a cabo.

"debemos conocer nuestras posibilidades"

En el taller de este fin de semana se explicarán de forma sencilla esos conceptos de la física cuántica que pueden ayudar al desarrollo personal. "Yo como físico y didacta sé que esta unión es posible y redunda en beneficios muy positivos para cada persona". Se trata, ha dicho, "de conocer tus posibilidades" porque "a veces uno tiene que arriesgar al igual que cuando alguien pasa por un entorno lleno de niebla, no sabes lo que hay al otro lado, todo son posibilidades, pero hay que cruzar para poder crear algo nuevo".

"Todos somos ecuaciones de ondas cuánticas, con nuestras propias características intransferibles y que hacen diferente a cada individuo, si sacamos el mayor potencial de cada uno de nosotros la situación mejoraría y para ello nos unimos con la biodanza porque ésta nos ayuda, con sus ejercicios, a crear una nueva realidad", ha añadido.

Se trata de aplicar los conceptos de la física cuántica a la vida cotidiana porque "aunque no es sencillo" ofrece "cambios muy significativos en la persona".

Con estas ideas, el taller de este fin de semana trabajará en su parte práctica con la música, el movimiento y la emoción "como expresividad de la motricidad y la emoción". En estos talleres, como ha explicado Augusto Madalena, "no se habla" solamente "se utilizan gestos y movimientos" para "captar los potenciales adormecidos y florecer en su máximo esplendor". Además, ha indicado, también ayuda "a mejorar la autoestima, aumentar la vitalidad, incrementar los dones artísticos, tener mayor seguridad, disminuir los miedos y ahuyentar el cansancio o la fatiga" para que todos "podamos expresar nuestra identidad sin miedo".

Todo sumergido también con músicas orgánicas que establecen "una relación de armonía" como el llamado Efecto Mozart. Música de jazz, clásica e incluso ritmos tropicales ayudarán a hacer más efectivo las intenciones de este taller.

Biodanza y física cuántica

Con estas bases se celebra en Logroño el taller 'Biodanza y Física Cuántica'. La física cuántica ha traído un nuevo paradigma para las ciencias y una nueva forma de percibir y actuar en el mundo porque propone un mundo en el que no hay certezas sino probabilidades y posibilidades.

Por su parte, la biodanza es un sistema de desarrollo personal que fue creado en los años 60 por el psicólogo y antropólogo chileno, Rolando Toro. Con Biodanza se aprende a vivenciar las posibilidades que la vida nos presenta. Potencia la alegría de vivir, siempre se practica en grupo y utilizar recursos como la música, el movimiento y las relaciones interpersonales. Ayuda a desarrollar los potenciales humanos y lleva a las personas a transformaciones poderosas en lo orgánico y lo existencial.

A través de la música y de la mano de la diversión, el disfrute y la alegría, se pone en marcha un sistema muy estudiado y contrastado para desarrollar los potenciales humanos que todos tenemos.

Implantada en 35 países y regulada por la International Biocentric Foundation (IBF), con sede en Irlanda, tiene fundamento científico y sigue un modelo teórico propio estructurado en teorías biológicas, antropológicas y filosóficas. Su base es el Principio Biocéntrico, que sitúa la vida y su evolución en el centro de todo.