La Policía Nacional ha detenido a dos hombres como presuntos autores de los delitos de cohecho, negociaciones prohibidas a funcionarios públicos y blanqueo de capitales tras averiguar que un funcionario de un ayuntamiento de una localidad valenciana, derivaba a los ciudadanos que solicitaban información sobre trámites para proyectos, obtención de licencias y otros trámites al despacho de un ingeniero de otra localidad valenciana. Los policías averiguaron que este ingeniero pagaba al funcionario la mitad del importe del proyecto que abonaban las personas que acudían a su despacho, según ha informado la Jefatura Superior de Policía de la Comunitat Valenciana en un comunicado.

Los agentes realizaron tres registros en domicilios y en el ayuntamiento —cuya localidad no ha trascendido—, donde intervinieron documentación, material informático y un coche de la marca BMW, así como unos 100.000 euros bloqueados en cuentas bancarias.

Las investigaciones se iniciaron al tener conocimiento los agentes a través de una comunicación de la Fiscalía Provincial de Valencia de que, al parecer, un funcionario de un ayuntamiento de una localidad valenciana se estaría aprovechando de su puesto de trabajo para derivar a los ciudadanos que solicitaban información sobre trámites para proyectos al despacho de un ingeniero en otra localidad valenciana; una gestión por la que podría estar recibiendo alguna compensación económica.

Durante las investigaciones, los policías averiguaron que al menos una decena de personas habían acudido al despacho del ingeniero por indicación del funcionario del ayuntamiento, así como que éste era de los técnicos que más proyectos había presentado, la mayoría de ellos en el año 2014, y que eran resueltos "en un tiempo récord", según el comunicado.

Asimismo, los investigadores descubrieron que el ingeniero habría cobrado unos 90.000 euros por los trabajos que le derivaba el funcionario del ayuntamiento y que este último recibía en metálico la mitad del importe del coste del trabajo realizado por el ingeniero.

Por este motivo, los agentes detuvieron a los sospechosos, de 49 y 51 años, cuando salían de su domicilio y realizaron dos registros domiciliarios donde intervinieron documentación y material informático, así como unos 100.000 euros de sus cuentas bancarias bloqueadas. Además, realizaron un registro en el ayuntamiento, donde intervinieron diverso material informático.

Los detenidos, sin antecedentes policiales, uno pasó a disposición judicial, mientras el otro fue puesto en libertad, no sin antes ser advertido de la obligación de comparecer ante la Autoridad Judicial cuando para ello fuese requerido.