La Guardia Civil ha detenido a siete ciudadanos marroquíes en Andosilla acusados de integrar una organización criminal dedicada a facilitar la entrada irregular en España de inmigrantes también marroquíes, a cambio de una contraprestación económica que oscilaba entre los 5.000 y 10.000 euros.

La organización presuntamente captaba en Marruecos a aquellos compatriotas que estarían dispuestos a abonar unas sumas de dinero pactadas previamente, bajo la promesa de facilitarles el traslado hasta territorio español, generalmente hasta Navarra y, una vez allí, facilitarles también los trámites documentales y administrativos necesarios para poder regularizar su situación, según ha explicado la Guardia Civil en un comunicado.

Para realizar el traslado de los inmigrantes desde el territorio marroquí hasta España utilizaban vehículos convencionales pertenecientes a los integrantes de la organización, así como transportes marítimos regulares que realizan los trayectos entre Marruecos y España.

Los inmigrantes entraban en España, bien con documentación que les facilitaban los integrantes del grupo y que pertenecían a otros individuos coincidentes con su aspecto físico, suplantando así la identidad de los titulares reales de dichos documentos, bien ocultos en el interior de vehículos en condiciones muy precarias, con las que se ponía en riesgo su integridad física debido a las largas distancias recorridas, ha explicado la Guardia Civil.

Una vez finalizado el trayecto, en la mayoría de los casos no se llevaba a efecto lo pactado entre la víctima y los captores ya que no se facilitaban los trámites necesarios para regularizar la situación de los inmigrantes, que quedaban en situación de desamparo. En otros casos, no se saldaba la deuda pactada y los inmigrantes eran retenidos contra su voluntad en viviendas controladas, bajo amenazas y privados de libertad, hasta que conseguían hacer frente a la deuda contraída.

Durante el desarrollo de la investigación aparecieron indicios de que una persona pudiese estar retenida contra su voluntad en una de las viviendas utilizadas por la organización en Andosilla. Esta persona estaría pendiente de pagar la deuda saldada y se encontraba en unas condiciones pésimas de higiene. Era obligado a dormir en el suelo sobre unas mantas y acompañado en todo momento por una persona encargada de su vigilancia, ha explicado la Guardia Civil.

Durante los registros en la denominada operación 'Viña' se han intervenido dos vehículos, uno de ellos utilizado para introducir en España a las víctimas en condiciones que suponían un claro riesgo para su integridad física. Además, se ha intervenido diversa documentación que evidencia la actividad ilícita de los detenidos.

Las diligencias instruidas por la Guardia Civil, junto con los detenidos, han sido entregadas en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Estella, cuyo titular ha decretado prisión incondicional para tres de los detenidos.