El hombre acusado de intentar matar a su abogada, L.M.V.D., y cuyo marido resultó herido de gravedad en el incidente, ha negado que fuera al despacho con la intención de acabar con su vida, algo que han rechazado tanto la letrada, A.N.T., como su marido, A.D.F..

La abogada, en un momento dado, ha declarado que estaba claro que el hombre iba a matarla cuando se acercó a su despacho profesional.

El juicio por estos hechos, ocurridos el 12 de noviembre de 2013, se ha iniciado este martes en la Sección Segunda de la Audiencia de Ciudad Real y está previsto que dure tres días.

El fiscal pide para el acusado un total de nueve años de cárcel por un intento de homicidio, mientras que la acusación particular, que ejerce la propia abogada y su marido, considera que hubo dos intentos de asesinato por los que pide en total 32 años de cárcel.

Por su parte, la defensa del acusado solicita la libre absolución con los argumentos de que el hombre no tenía intención de matar y apelando a sus problemas psicológicos.

Versiones contrapuestas

El acusado ha dicho que se acercó al despacho de la abogada el día de autos para pedirle explicaciones por cómo habían acabado algunos temas que le había llevado la letrada, entre ellos, su separación y divorcio.

Tras varias negativas de la abogada, según el acusado, se presentó en el despacho sobre las 20.45 horas del día 12 de noviembre de 2013 y, con una excusa, sorteo la entrada de la puerta de la calle hasta llegar al despacho.

Allí, le abrió el marido que, al verle enfundando con un una bufanda, un gorro y guantes, le intentó impedir la entrada, según ha manifestado el procesado en su declaración.

Sin embargo, el marido de la abogada ha señalado que le dijo al acusado que así no podía pasar e intentó cerrar la puerta, algo que no consiguió porque el acusado hizo más fuerza.

En un momento dado, el acusado sacó un cuchillo y se le clavó intencionadamente en la parte de la sien izquierda, intentando tirar hacia abajo, con la voluntad de matarlo, algo que no logró, según ha dicho el marido.

Por su lado, el acusado ha declarado que no tenía intención de matarlo y que el que le clavara el cuchillo "fue solo un efecto del propio forcejeo" que mantuvieron.

La persiguió por la calle

Mientras tanto, la abogada, a la que el acusado cogió supuestamente por el cuello, logró zafarse, ir a su despacho, pedir socorro a través de la ventana y saltar por encima de los dos hombres que seguían peleándose, para huir a la calle, donde, dijo que el acusado la persiguió hasta poder esquivarle.

El acusado, que ha reconocido que tiene una depresión desde los 18 años, ha dicho que fue al despacho vestido de la forma que lo hizo y con un cuchillo, un punzón y guantes sólo porque tenía miedo ya que le habían atracado unos días antes.