La portavoz del PP en las Corts, Isabel Bonig, ha recordado este miércoles al presidente de la Generalitat, Ximo Puig, que el acuerdo alcanzado por todos los grupos, incluido el suyo, en la reivindicación de la deuda histórica y un nuevo modelo de financiación, "no es un cheque en blanco" y, además, ha asegurado que no permitirán "esta política de no tengo, no hago absolutamente nada, no gestiono porque no hay dinero" con medidas de gasto que "nadie dice cómo las van a pagar".

Tras la Junta de Síndics, la 'popular' ha valorado el acuerdo conseguido pero ha incidido en que eso no significa que desde el PP no vayan a ser "duros y exigentes", especialmente porque ese consenso podría haberse vivido en 2009, 2011 y 2013, ha recordado, al tiempo que ha pedido a Puig que explique a los valencianos "por qué entonces su grupo no apoyó una propuesta de resolución que era exactamente igual a la que ayer firmamos".

A su juicio, "las personas tienen que estar por encima de las cuitas políticas" y, por ello, el PP aprobó la resolución, para que Puig "no encuentre la soledad que el PP tuvo desde el 2009". "El PP decía la verdad, antes cuando gobernaba Zapatero y ahora cuando gobierna Rajoy, y quien basó toda su estrategia en una mentira, en una demagogia y utilización política han sido PSPV y Bloc Compromís", ha dicho.

Además, ha cuestionado por qué no apoyaron las propuestas de resolución presentadas por el grupo popular, entre ellas la que defendía que "los 1.600 millones de euros que el Consell va a tener de más en 2016 se destinen a educación, sanidad y políticas sociales" y ha agregado: "Me da la impresión de que están pensando en otro tipo de políticas al margen de esto para cubrir y establecer una red clientelar".

También ha criticado que no se aprobara la propuesta de presentar un plan de deuda para ver cómo se reduce o la creación de un consejo de transparencia autonómica y de control presupuestario.

"Reclamar lo que a uno le corresponde es de justicia pero gastar más de lo que uno tiene en medidas electoralistas y para tapar los verdaderos problemas que tiene el Consell, de inactividad y de falta de gestión es una irresponsabilidad y el PP se lo va a afear y todos los días se lo va a recordar al presidente de la Generalitat. Está muy bien quejarse pero hay que empezar ya a decidir y a tomar medidas", ha concluido.