Calidad Pascual, a través de su director general ejecutivo, Ignacio García-Cano, y Ana Gil Nuño, directora ejecutiva en EDF Fenice Ibérica, filial del grupo EDF Fenice en España y empresa líder a nivel europeo en servicios energéticos y medioambientales, han firmado un acuerdo para la optimización de los servicios energéticos de la compañía alimentaria en su complejo de Aranda de Duero (Burgos).

Esta es la segunda fase del contrato marco firmado el pasado año por el que EDF Fenice se convertía en 'Socio Energético Global' de Calidad Pascual durante los próximos diez años.

El acuerdo contemplaba el desarrollo de proyectos de eficiencia energética en las distintas instalaciones industriales de Calidad Pascual, iniciando la colaboración en la fábrica de Gurb (Barcelona).

Ahora este modelo se traslada al complejo fabril de Calidad Pascual en Aranda de Duero, donde EDF Fenice asumirá como socio inversor la explotación, operación y mantenimiento de las instalaciones energéticas y medioambientales existentes, prestando asimismo servicios de consultoría energética.

Reducir costes y consumo energético

Esta alianza responde al objetivo de lograr un elevado grado de ahorro energético y de costes en las instalaciones industriales arandinas de Pascual, permitiendo la reducción progresiva del gasto energético, así como el refuerzo paralelo de su competitividad.

El modelo 'Socio Energético Global' es pionero en su sector y supondrá ventajas significativas para Pascual.

En palabras del director general ejecutivo de Calidad Pascual, Ignacio García-Cano, "la colaboración con EDF Fenice Ibérica encaja perfectamente en la estrategia de sostenibilidad ambiental basada en el ahorro energético". "Además," prosigue García-Cano, "permite dar un importante salto adelante en la gestión de nuestros activos energéticos al extender ahora este proyecto a nuestra base industrial de Aranda de Duero".

Calidad Pascual (www.calidadpascual.com), empresa familiar con un conjunto de valores consolidado y diferenciador, referente en el sector de la alimentación, inició su andadura en 1969 en Aranda de Duero, para implantarse en poco tiempo en toda España y exportar hoy a 62 países.

Con una gama de más de 200 productos, siete plantas, 27 delegaciones a través de su empresa de distribución Qualianza y más de 2.166 empleados, su principal actividad es la preparación, envasado, distribución y venta, entre otros, de lácteos y derivados con la marca Pascual, aguas minerales Bezoya, bebidas vegetales Vivesoy, Bifrutas y Mocay Caffè.

Calidad Pascual complementa su portfolio con otros productos de valor añadido, gracias a alianzas con empresas como Idilia foods (fabricante de batidos Cola Cao y Okey), Unilever, Esteve, Agua Pedras Salgadas (Grupo Unicer), Kellogg, Heinz e Isabel de Conservas Garavilla.